Diego Álvarez está en el Penal de Chimbas desde el viernes pasado, después de presentarse ante el juez Guillermo Adárvez, del Cuarto Juzgado de Instrucción. Se le leyó en detalle la prueba que pesa sobre él como principal sospechoso por el cruel femicidio a su esposa Brenda Requena, que fue descuartizada y sus restos quemados y enterrados en hondonadas en un predio de Campo Afuera, en el departamento Albardón.
De acuerdo a lo que expresó su abogado Marcelo Abarca Gómez a Diario La Provincia SJ, "sólo le preocupan sus hijos. Lo reitera en cada oportunidad. Tras estar frente al juez y teniendo acceso a la causa, definimos estrategia. No podemos adelantar más que eso".
Si bien no pidió aún ver a los chicos de 5 y 6 años, "si lo visitaron antes otros familiares que lo mantienen al tanto sobre sus hijos. Sigue consternado y entristecido. Es su derecho gestionar tener un contacto con ellos pero ahora estamos concentrados en lo que sucederá desde este lunes", señaló.
Álvarez estará en Tribunales nuevamente mañana para prestar declaración indagatoria. Si bien no hay una imputación firme, la Fiscalía, representada por Carlos Rodríguez, solicitó que sea "homicidio doblemente agravado por el vinculo conyugal y femicidio" sumado a la acusación de "lesiones y daños" hacia José Guajardo, el hombre que estaba con la joven mamá cuando fueron sorprendidos por el hombre.
