Florencio Chávez (42) apareció muerto de un disparo en la cabeza, en el interior de su auto Volkswagen Bora con vidrios polarizados, el 23 de junio de 2018. El o los asesinos se llevaron un maletín con dinero y una máquina para contar billetes. En su baúl quedó, sin embargo, más dinero en una caja (poco más de un millón de pesos- entre dólares y pesos-) y otras pertenencias como su billetera. Desde ese momento, la causa poco y nada avanzó y es uno de los crímenes en San Juan que pasó a la lista de los no resueltos aún.
¿Quién mató a Florencio en pleno mediodía en Roque Sáenz Peña casi Landa, en Santa Lucía? "Es un caso que está frenado. Lo último que se incorporó fue el registro de las cámaras de seguridad de la zona, cuyas imágenes no muestran nada. Lamentablemente no se incorporaron más elementos a la etapa de instrucción", señaló a Diario La Provincia SJ el fiscal Carlos Rodríguez.
Señaló, además, uno de los grandes obstáculos que tiene la investigación del caso que está en el Tercer Juzgado de Instrucción, a cargo de Guillermo Adárvez. "Chávez usaba su auto como "cueva móvil", es decir como lugar para hacer transacciones financieras para terceros y que no estaban registradas. Movía grandes sumas de dinero.Entonces sabía dónde estacionarse para que no lo vieran; donde no hubiera cámaras. Eso nos jugó en contra", puntualizó.
Otro obstáculo es que, por el mismo tenor de su actividad, era muy reservado. De acuerdo a lo que aportaron familiares y personas de su entorno no comentaba con quiénes ni para quiénes trabajaba."No tenemos sospechosos. No hay nombres. Y en cuanto a los registros de criminalística, mostraron que lo ultimaron con un revólver calibre 22. No tenemos, tampoco, la certeza de un arma homicida secuestrada", agregó.
Por parte de su familia, reina la angustia por el paso de tiempo. "Mi hermano no descansa en paz. Al averiguar cómo sigue la causa nos dicen que están trabajando y debido a que no se cierra una etapa, no podemos tener acceso a lo que se investigó. Hay muchos grises como por ejemplo que no se llevaron todo el dinero pero sí, una carpeta con documentación de Florencio. Nosotros seguimos golpeando puertas para pedir que el caso no se cajonee", dijo su hermana Melisa Chávez.
Agregó que ellos mismos han buscado tener algún indicio hablando con los vecinos de la zona donde apareció el auto con el cuerpo de Florencio y pedido innumerables veces que la gente que haya visto algo, colabore. "Los asesinos están libres; seguramente amparados por alguien de poder, ya sea político o empresario. No hay otra explicación, a nuestro entender, que haga que todo vaya tan lento. Queremos justicia para mi hermano e insistiremos hasta lograrla", sentenció.
