Tras los chequeos y estudios de control, la Justicia ordenó que se le practicara un análisis de filiación a una bebé que nació en un parto domiciliario es hija de una pareja que fue demorada por la Policía sanjuanina, tras la aplicación de un protocolo especial. Con el resultado positivo, se les otorgará la partida de nacimiento que los papás querían solicitar, una vez que recibieran un certificado en el Hospital Rawson.
El caso tomó estado público tras la exposición en redes sociales del hecho por parte de un familiar. Allí se argumentó que hubo demoras en la atención de la joven Fiorela Eiras y su bebé que ahora aún están internadas, confirmaron fuentes oficiales a Diario La Provincia SJ. En tanto, Antonio Rosales, el papá y pareja de la mamá, recuperó la libertad. La defensora de Menores, Patricia Sirera, señaló a este diario que "se procedió conforme a lo dispuesto por el juez y aguardamos los resultados. Se atendió a la mamá y al bebé conforme a los protocolos del Hospital y se les aplicaron las vacunas correspondientes".
La abuela de la pequeña, Marisa Maragliano contó esta mañana que su hija llegó hasta el Hospital Rawson, con su bebé teniendo menos de 24 horas de nacida, para ser atendida y recibir asesoramiento médico en el tema del registro. Sin embargo, lejos de contener y ayudar, la hicieron esperar con la menor en brazos en la sala de espera y a su pareja lo llevaron detenido hasta la Comisaría Primera.
"Fiorela y Antonio se presentaron en el hospital a pedir el certificado de haber parido unas horas antes y el control de horas de nacida de la bebé que sí se lo otorgó un médico negándole el suya a la mamá", explicó Marisa en la red social Facebook.
Luego indicó que "no solo le negaron un derecho ya que esos dos certificados más dos testigos son requisitos indispensables para dar identidad a la bebé sino que quedó demorada la mamá en el hospital con su beba y el papá detenido sin habérsele mostrado ninguna orden de detención".
La mujer contó que se les negó tanto a la joven madre como a la bebé el "derecho a la alimentación y descanso". Así estuvieron más de 10 horas en la sala de espera del nosocomio sin explicación alguna.
Según informaron fuentes policiales, tal medida se dio a partir de que los médicos sospecharon la procedencia de la bebé. No creyeron que ella fuera la madre ni que la bebé hubiera nacido en la casa y por eso informaron al juez Pablo Flores de la sospecha. Ante esto se procedió a detener al padre de la bebé y a la mujer dejarla con custodia policial.
