Tras más de cuatro días internado en Terapia Intensiva del hospital Marcial Quiroga, murió este jueves Facundo Pastén, el chico de 22 años de edad que tenía el 90% de su cuerpo quemado. El joven había sufrido una descarga eléctrica en el Lote hogar N°3 de La Bebida cuando intentó bajar un volantín que se había enredado en los cables de alta tensión.
El chico tenía todos sus órganos comprometidos, especialmente los riñones y pulmones, y su familia ya había recibido por parte de los médicos pocas esperanzas de que se podía salvar.
Por su parte, el niño de 10 años que se salvó se llama Sergio Castro y tiene el 15% de su cuerpo quemado sobre todo los miembros inferiores y superiores más del lado izquierdo y una lesión mínima en la cara. Está estable y no corre riesgo su vida, está bien. Está internado en el Sector Quemado recibiendo curaciones de manera diaria, bajo anestesia y con tratamiento para el dolor. La evolución es favorable.