Myriam Morales tenía 40 años y este viernes fue hasta la casa de su padre en Alfonso XIII entre 12 y 13 para limpiarla porque su madre había viajado a Buenos Aires. Sin embargo, este día encontró la muerte en manos de alguien que aún no se logró identificar. La mujer fue hallada muerta, pasado el mediodía, por su mismo padre quien regresó de la finca a almorzar y vio a la mujer tendida en sangre en el comedor de su casa.
Según fuentes confiables, la mujer presentaba cuatro heridas de arma blanca en su cuerpo, de las cuales tres estaban en su tórax y una en el cuello. Esta última fue la que hizo trascender en un principio que la chica había sido degollada, sin embargo la profundidad de la misma no indica lo mismo.
En este escenario, la primera hipótesis fue que fue víctima de un robo ya que desapareció la moto 110 cc con la que la mujer había llegado a la casa de su padre. Sin embargo con el correr de las horas, ésta empezó a desvanecerse porque el agresor no se llevó dinero en efectivo que había ni otras cosas de valor. Lo único fue la moto que habría sido usada para escapar.
Ante esto, la hipótesis que tomó fuerza fue la del femicida. Es que la mujer había denunciado a una expareja por amenazas y hostigamiento y sobre él caía una orden de restricción para acercarse. Ahora se lo busca intensamente para saber si tuvo alguna vinculación con el crimen o no. Pero aún no se logra dar con él.
Interviene en el hecho personal policial de la Comisaría Séptima bajo las órdenes del juez del Cuarto Juzgado de Instrucción, Martín Heredia Zaldo.
