En medio de un clima caldeado por las reacciones de familiares de Yamila Pérez, la joven mamá que fue asesinada y masacrada el 16 de junio de 2018, el único acusado Evaristo Molina aceptó la pena de prisión perpetua. En la sala III de la Cámara Penal escuchó a los jueces Maximiliano Blejman, Silvina Rosso de Balanza y Eugenio Barbera, quienes lo interrogaron si conocía qué significaba la pena, la máxima por ese delito femicida.
Molina se responsabilizó por homicidio doblemente agravado, por la alevosía y violencia de género en el juicio abreviado que fue aceptado por el Tribunal, tras ser solicitado por su defensa y acordado con Fiscalía.
Con dificultades para movilizarse, ya que tenía una pierna inmovilizada, se mostró nervioso pero no intentó defenderse. Al salir de la sala, una de las hermanas de Yamila logró darle un golpe de puño y la Policía tuvo que contener la situación.
El caso
El 18 de junio, los sanjuaninos se conmovían con un brutal crimen. El cuerpo de una joven apareció mutilado, sin sus brazos, en un descampado de El Mogote, Chimbas. La chica era Yamila Pérez, de 27 años de edad, y había sido asesinada dos días antes, el 16 de junio según indicó la autopsia. Sus miembros fueron mutilados porque estaban tatuados. El asesino además le sacó el pellejo de la cara, incluso parte del cuero cabelludo, con el fin de que nadie pudiera identificarla. Sin embargo un tatuaje en el tobillo permitió identificarla.
Molina cayó porque una receta médica en el lugar en el que depositó parte del cuerpo lo delató. Argumentó que Yamila lo había extorsionado con contarle a su esposa acerca de la relación.
A un más de año de aquel crimen, hay un detenido como único responsable del aberrante hecho pero él nunca confesó dónde depositó los brazos de la víctima y tampoco dijo si alguien más lo ayudó. El procesado bajo la caratula de Homicidio Doblemente Agravado por Alevosía y por Violencia de Género es Evaristo Molina, quien tiene 68 años de edad y confesó ante el juez Guillermo Adárvez, del Tercer Juzgado de Instrucción, ser el autor del crimen.
