Sufrieron la peor pérdida que puede tener una persona: de su hijo o hija. El dolor que los atraviesa, lo comparten, lo entienden, lo viven y los impulsa a seguir adelante. Son las madres y padres del dolor que se unieron para salir a la calle para pedir justicia por aquellas personas que murieron víctimas de un siniestro vial.
Este fin de semana, con grandes carteles y una bandera que los unía, reclamaron que aquellas personas que protagonizaron siniestros viales con víctimas fatales, sean juzgados y reciban condenas "ejemplares".
"Nuestros hijos fueron víctimas involuntarias de quien infringieron una ley. Por eso queremos que las condenas sean acorde a la magnitud de las pérdidas y que esas personas ya no puedan nunca jamás manejar", expresó a Diario La Provincia SJ, Lucía Gutierrez, mamá de Ariel, quien indicó que los padres "pasen por lo mismo no hay respuestas posibles" y el dolor se vive de forma distinta en cada uno.
Las familias piden que se cambie la ley, "que las condenas sean justas y aplicables con una sanción acorde a la perdida de la vida humana". "A quien se le han truncado sueños, planes, historias un futuro, que quien infrinja la ley establecida, en exceso de velocidad, alcohol en sangre, no goce del privilegio de la libertad", expresaron los padres del dolor.
La marcha se realizó el sábado pasada, motivada por la muerte de Nahuel Chávez, quien murió atropellado por una camioneta cuando iba al trabajo en Pocito. Sus padres y familiares marcharon acompañados por la "Familia del dolor y la esperanza" con el objetivo que quien cometió el siniestro, se juzgado y condenado "como corresponde".
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