Tras abstenerse de declarar el pasado jueves frente al juez Juan Pablo Ortega, del Primer Juzgado Correccional, el exrugbier Juan José De la Plata tendría esta semana la resolución judicial por la acusación de agredir a cintazos a su hija de 13 años como castigo.
Tras contar con informes y medidas que determinen su responsabilidad en una "agresión leve agravada por el vínculo en perjuicio de la menor" y del aporte del fiscal del caso, Roberto Mallea, el magistrado decidirá si lo procesa o es sobreseido. En tanto, sigue en camino la tramitación del pedido de excarcelación presentado por la defensa de De la Plata.
El pasado martes, trascendieron capturas de mensajes de WhatsApp que el exrugbier le envió a su hija pidiéndole disculpas. "Te amo", "Perdoname", "No quise lastimarte", dicen los primeros mensajes que muestran un sentido de arrepentimiento del hombre que en el chat está agendado como Paaaa. Luego el hombre dice "me equivoqué".
Posteriormente viene la palabra de la nena que acepta los golpes y le dice: "vos nunca buscas lo peor para mí y lo entiendo". Luego le dice que él se equivoca en algunas cosas y le aclara que "la violencia nunca arregla nada. No va a hacer que me comporte mejor ni nada".
La nena confiesa que "con el tiempo has logrado a que te llegue a tener miedo y eso no es lo que te brinda un padre".
