Violencia total

Golpearon a un chofer de colectivo con un rastrillo en la Bebida

Tras el mal rato, la mujer bajó en la parada y el chofer no supo más nada de ella hasta que llegó al galpón de la empresa en La Bebida donde lo esperaban para pegarle.
jueves, 31 de enero de 2019 14:45
jueves, 31 de enero de 2019 14:45

Un joven chofer de colectivo sufrió un hecho de extrema violencia cuando terminó su recorrido este martes en la noche en La Bebida, Rivadavia. Se trata de Matías Castro quien desde hace tres años trabaja en la línea 17 de la empresa La Positiva y sufrió un altercado con el esposo de una pasajera que quiso bajar en un lugar que no es parada de colectivos, el chofer se lo negó y luego la pareja lo esperó en la empresa y le pegaron. 

"El martes a las 21 llegaba a la terminal y una señora con un hijo de 4 años y una hija de 1 año me tocan el timbre en la esquina de Rawson y Córdoba para bajar, lugar donde no es parada y le digo que la parada es a la vuelta. Me dijo que estaba el cartel, entonces le dije que desde junio de 2017 ya no es más parada ahí sino a la vuelta. Seguí con mi trabajo y me dijo que le abriera la puerta para bajar ahí en la calle aprovechando que un micro estaba atravesado. Le dije que no, se enojó y empezó a insultar", señaló el chofer en radio Sarmiento.

Tras el mal rato, la mujer bajó en la parada y el chofer no supo más nada de ella hasta que llegó al galpón de la empresa en La Bebida. Allí, cerca de las 22 horas, adujo a los guardias que se había dejado unos cuadernos en el colectivo y que necesitaba pasar con su marido para hablar con el chofer. Cuando éste llegó al galpón se encontró con ambos que rápidamente lo increparon.

"Con el coche adentro de la empresa, el marido de la mujer me preguntó por qué insulté a su mujer. Le dije que no la insulté y que le dije que esa no era la parada. Pero él no me dejaba hablar y gritaba. Le dije que me acompañaran atrás a hablar con los dueños para que le explicaran cuál es la parada correcta y ahí agarró un rastrillo que es de la empresa y me dijo ´te lo parto en la cabeza'. Me cubrí, lo dejé pasar pero me la pegó en la muñeca, en la mano derecha y en el abdomen. Ahí me sangró porque el rastrillo es con punta", explicó.

Este miércoles, el joven se hizo una placa y le salió bien pero ahora tiene que ir al traumatólogo por las consecuencias en la mano y muñeca. "Si no me hubiera cubierto con la mano y el brazo, no sé qué hubiera pasado", señaló.

Desde la empresa llamaron a la policía comunal y luego intervino personal de las comisarías 13 y 34 de Rivadavia. El chofer radicó una denuncia contra el agresor en la comisaría 13 pero aquel no quedó detenido.

"Yo hice la denuncia como corresponde y parece que a él no le hicieron nada", lamentó el hombre quien subrayó que él tiene un hijo y nunca le hubiera gustado que el pequeño viera la violencia con la que trataron a su padre. "Ese ejemplo no se los voy a dar a mis hijos. En cambio ellos fueron a pegarme con los hijos que vieron todo", finalizó.

Comentarios