El hecho habría sucedido a fines del año pasado y eso derivó en una denuncia por parte de Monseñor Alfonso Delgado contra dos personas que trabajaban para el Arzobispado: un tesorero y un contador.
Según publicó El Nuevo Diario, en su última edición, Delgado realizó una auditoria en 2015 en el que saltaba el desvío de los fondos de la limosna (pertenecientes a distintas iglesias y parroquias de la provincia) hacia las cuentas de dos personas de apellidos Brozina y Tapia. Con tal información llegó hasta la fiscalía Nº 5 de Ana Lía Larrea indicando que la estafa sería de 700 mil pesos.
Con este material, el juez Benedicto Correa ordenó la detención de los dos hombres y una serie de allanamientos. Por estas horas la justicia analiza un pedido de eximición presentado por los abogados defensores.