"Una travesura". Así definió la familia de Emiliano Villarreal lo que él realizó esta semana y que mantuvo en vilo a la policía de Buenos Aires. Es que el joven se había ido de su casa de Los Hornos a principios de esta semana sin decir a dónde iba y tampoco se conocía su paradero.
A partir de esto, la familia pidió ayuda a la policía y se inició un fuerte operativo para encontrarlo. Este jueves, la desesperación mermó cuando los uniformados informaron que el joven estaba sano y salvo junto a dos amigos con los que había viajado el martes por la tarde rumbo a San Juan para presenciar el partido de Estudiantes por Copa Argentina.