Capital

Rubén Elizondo, el penitenciario que murió evitando un robo y será despedido con custodia de honor

Rubén era padre de dos hijos y vivía cerca de donde fue el robo. Su entorno lo definió como muy familiero y hace pocos días su esposa Natalia Sánchez cumplió años a su lado. Este sábado la policía lo despedirá con custodia de honor.
sábado, 18 de julio de 2015 00:00
sábado, 18 de julio de 2015 00:00

Tenía 35 años y durante años se dedicó al trabajo metalúrgico. El 17 de julio del 2014 ingresó a las fuerzas de seguridad motivado por la necesidad de defender al prójimo y combatir el delito. Pero la vida le jugó una mala pasada y justo un año después murió cumpliendo su función aunque no estaba de servicio.

Ángel Rubén Elizondo era agente penitenciario de instrucción en el Servicio Penitenciario de Chimbas. Este viernes se encontraba en el taller metalúrgico Hidalgo, en Urquiza a metros de Pedro de Valdivia, como lo hacía varias veces, porque allí trabajaba su amigo. Alrededor de las 20, dos malvivientes ingresaron a robar, un tercero los esperó afuera en la moto, y el penitenciario trató de evitarlo. Pero como consecuencia recibió un disparo en el torax que horas después le costó la vida.

Los ladrones huyeron y Elizondo fue trasladado al Servicio de Urgencia del Hospital Rawson con una herida grave en su hígado donde murió pasada las 22.

Ángel era padre de dos hijos y vivía cerca de donde fue el robo. Su entorno lo definió como muy familiero y hace unos días su esposa Daniela Castro cumplió años a su lado. Precisamente este sábado, un día después del crimen, también iba a festejar el cumpleaños de su abuela. 

"Era muy querido dentro de la fuerza porque siempre se mostró muy predispuesto y solidario", según declararon fuentes polciales que adelantaron que este sábado lo despedirán en Cochería San Ramón con custodia de honor.

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