Cuando el poeta Leonidas Escudero se levantó temprano no lo podía creer. Parte de las rejas de su casa fueron robadas y sintió la inseguridad desde muy cerca. Según relató su hija, Rosa, en ningún momento sintieron algún ruido o señal que advirtiera que estaba siendo víctimas de un robo.
"Esa noche me acosté tarde. Estuve trabajando en la computadora hasta las 3 de la mañana y por ende las luces quedaron prendidas hasta esa hora. Pensamos que fue después de ese horario el robo. Cuando nos levantamos temprano a la mañana faltaba las rejas del portón. Lo deben haber sacado con un gato o con otra cosa, no lo se", expresó a Diario La Provincia quien agradeció a dios que todo quedó ahí y no sufrieron ellos algún tipo de agresión.
La denuncia fue radicada en la Seccional Tercera.