Habló frente a la prensa y dijo unas palabras que lo incriminarían directamente al crimen. Fernando Flores, el joven de 22 años que esá imputado en el caso de la muerte de Rocío Mancuso Villalón, fue llevado a Tribunales en la mañana de hoy. En el ingreso al lugar, lo aguardaba la prensa. Frente a los micrófonos y con las cámaras encendidas el chico confesó: "No quise hacerlo... estaba curado... no me acuerdo de nada", ante la mirada sorpresiva de los comunicadores.
Por otro lado, el chico señaló que es la primera vez que cae preso y que no lo quiso hacer. Al momento de ser consultado por la prensa sobre qué le diría a la familia, aseguró que le pediría perdón.
El joven, quien en ese momento se encontraba acompañado de la policía, ingresó al 5to juzgado de instrucción para ser notificado pr la jueza María Inés Rosellot sobre quién será su abogado defensor. Quien será el responsable de defenderlo será Gustavo Vila quien, al conocer que el chico se había incrimado directamente, aseguró que "el artículo 83 de la constitución nacional establece que ninguna declaración sin un abogado tiene valor".
Fernando Flores ya habría dado indicios de que era el asesino ante los policías el día que lo detuvieron. Según fuentes policiales, el joven confesó: "Se me fue la mano". Ambos eran amigovios y solían juntarse para tener una relación sentimental. Según los primeros trascendidos, esa noche Rocío le habría contado que estaba enamorada de otro chico y que ya no quería salir más con él. El resultado, un ataque de celos, la muerte de la chica y sin concretar ningún acto sexual.
