Este martes, Giuliano (Nano) y Santiago (Tato) se enfrentaron en una prueba decisiva con el objetivo de conseguir el liderazgo de la semana en la casa más famosa del país. El liderazgo en Gran Hermano (Telefe) otorga una serie de beneficios al ganador, lo que aumenta la competencia entre los participantes.
En una semana marcada por la tensión, tras la llegada de Jenifer a la casa y el foco puesto sobre su relación con los demás jugadores, Nano logró imponerse en la prueba y convertirse en el líder de la semana, sorprendiendo a sus compañeros y dejando claro su objetivo de mantenerse en el juego.
Tras consagrarse líder de la semana, Giuliano no solo logró asegurar su puesto en la casa, sino que también recibió beneficios clave que podrían cambiar el rumbo del juego. Entre ellos, el Big le otorgó el poder de fulminar a dos competidores, una herramienta decisiva para influir en la dinámica de la casa.

Además, Nano obtuvo el privilegio de otorgar un valioso poder a tres de sus compañeros, quienes tendrán la oportunidad de utilizarlo en la gala de nominación, lo que podría alterar las estrategias de los demás participantes.