El libro que Benjamín Vicuña escribió "Blanca, la niña que quería volar", en referencia a su hija fallecida, conmovió a todos aquellos que lo leyeron y conocieron detalles íntimos de la familia, que atravesó junto a Pampita y sus demás hijos luego de la partida de la única hija mujer que tuvo la pareja.
Invitado al programa Buenas noches a todos (TVN), conducido por Edgardo Fuentes, el actor fue consultado sobre cómo logró contener a su familia en ese momento tan duro y Benjamín abrió su corazón.
“Yo entendí el mismo día que no podía flaquear, no podía caer. Pasé a ser un sostén, contenedor, de todos, de mis hijitos y de mi mujer”, comenzó expresando Benjamín. “Tenía que mirar el horror en los otros, y había una determinación de que yo no podía caer”, agregó, con sinceridad.
“Fue lo que nos nació. Y por eso creo que mi proceso fue involutivo, porque diez años después yo estaba sufriendo diez mil veces más que en ese momento”, expresó continuando con su relato.
En ese entonces, recordó los métodos que aplicaba para tratar de que la familia continúe en el día a día. “En un principio, con mucho dolor y todo, yo tuve que ser el hombre, el padre, el proveedor, salir a trabajar. Decía ‘el día está lindo’, ‘hagamos deporte’”, dijo.
En ese entonces, remarcó el rol que tuvieron sus amigos para con la familia, ya que conformaron una especie de "red de apoyo" para asistirlo a él, a Pampita y a sus demás hijos.
“No sé si me va a quedar vida para agradecerles. Se organizaron para estar todos los días, eran una red de apoyo. Iban al supermercado, pagaban las cuentas, llevaban los niños a la escuela. Venían a almorzar y con bolsas de cosas”, finalizó Vicuña.