Mora estaba feliz y así lo demostró. La perrita que fue adoptada por el flamante ganador de "Gran Hermano", Marcos Ginocchio, fue una de las protagonistas de la final y acompañó de manera conmovedora al joven, que fue el último en apagar la luz de la casa más famosa.
La perrita se mostró cariñosa y cercana todo el tiempo a Marcos. El joven la alzó para despedir a Nacho y cuando lo alentaba en su camino a la salida de la casa, impresionó al fandom cuando movía sus patitas al mismo ritmo.
Después, no se movió del lado del Primo cuando rompió en llanto, desde el momento en que supo que era el ganador. Le buscaba la cara y ladraba, en su forma de animarlo, en la previa a la salida.
Juntos, apagaron la luz con "Gran Hermano" y salió con el Primo rumbo a la locura que los esperaba en el estudio de Telefe. “Ya es momento de abandonar la casa. Llevamos a Morita. Te he observado todo este tiempo desde el primer día en el que entraste con tantos sueños e ilusiones. Hoy sos el último en salir, los dos con Mora”, le dijo Gran Hermano a Marcos para comenzar a despedirlo.
“Una cosa más: me gustaría que compartamos el momento tan lindo de apagar las luces de esta casa”, le pidió el ojo que todo lo ve al ganador de Gran Hermano 2022, a quien también le dijo que cuide mucho a Morita. "Siempre", le respondió el Primo.
Debido a que en el lugar había mucha gente, los rescatistas de Mora (que era una callejerita que ingresó a GH junto a su hermanito, Caramelo, que fue adoptado por Romina Uhrig) se quedaron con ella, para evitar una situación de estrés y protegerla. Pronto, se reencontrará con Marcos para comenzar una nueva vida.
