Es sin dudas una de las integrantes de la casa más querida. Ingresó a Gran Hermano en enero pasado y se ganó el corazón del público y la audiencia. Mora, es una perrita mestiza que se sumó al reality junto a Caramelo para hacer más llevaderos los días en aislamiento y lo consiguió con creces.
Hace una semana, Caramelo se fue en los brazos de Romina Uhrig mientras que Mora quedó conviviendo con su dueño, Marcos Ginocchio y los otros competidores: Julieta Poggio y Nacho Castañares. Pero este lunes se termina el reality y con esto, las luces de la casa se apagan y las puertas se cierran hasta la próxima edición. En este contexto, los finalistas transitan emociones muy diferentes y hasta contradictorias.
Es que están felices por salir pero también la melancolía los atraviesa, especialmente a Nacho y Julieta que le dirán adiós a Mora, con quien ya no convivirán.
"Te voy a extrañar", fueron una de las primeras palabras que le dirigió Julieta a Mora una vez que se levantó y la tuvo entre sus brazos.
Más tarde, Nacho compartió un momento de amistad con la perra en el jardín en el que recordó que fue ella quien lo despertó. Simulando que ella le hablaba expresó: "hoy me levanté muy quilombera. Me puse en la oreja de Nacho para que se despierte y cuando se despertó me fui a dormir. Después queriendo comer el fiambre y subir a la mesa".
"Voy a extrañar mucho, mucho, mucho a la gorda que muerde", confesó para luego continuar jugando a los besos con la perra.