Este martes, Marcos y Romina se consagraron ganadores de la prueba de fuerza que les permitirá estar un paso de la gran final de Gran Hermano (Telefe). Por su parte, Nacho y Julieta no lograron conseguir el objetivo y quedaron directamente en placa de nominados.
"Quería que los cuatro llegáramos a la final", sostuvo, entre lágrimas Poggio. Y agregó que se sintió frustrada por no lograr el objetivo.
Además, le pidió en reiteradas oportunidades disculpas a Nacho, por no haberle ayudado a concretar la prueba. El joven admitió que fue muy difícil para los dos, pero que nadie tuvo culpa del resultado. Julieta no logró contener las lágrimas y aseguró que no quiere irse de la casa más famosa del país.
Con este resultado, Nacho y Julieta quedaron directamente en placa y este miércoles se definirá el nuevo líder de la semana.
Santiago del Moro reveló que fue la última prueba de liderazgo y lo que se viene será sorpresivo para todos. El público será el encargado de llevar a sus favoritos hasta la final.