Con la sencillez y la honestidad que la caracterizan, Lizy Tagliani emocionó a sus seguidores compartiendo un emotivo momento personal. Es que se reencontró con vecinos de su juventud que la marcaron y fueron parte importante de quien es, actualmente.
"Fue una noche maravillosa de esas que jamás me voy a olvidar... recuerdos que tomaron una forma tan real como si ese tiempo nunca hubiese pasado. Ellos los de la foto, son Maite, Maite hija y Ramiro mis vecinos de enfrente de la casa donde crecí... falta Magali la hija más grande y don Enrique. Don Enrique era luz, alegría y un alma revolucionaria y moderna. Él y esta familia hermosa eran la felicidad de la cuadra y de mi mamá que los adoptó como sus mimados y los cuidaba y cuido hasta que partió", detalló la actriz de "Los Bonobos" y conductora del éxito "Got Talent Argentina".
Con detalles, compartió anécdotas: "Recuerdo la casa de ellos siempre con música, risas y gritos... Los lunes una colección de bolsas con los desechos de un domingo lleno de anécdotas y festejos. Don Enrique fue el primero que me sacó de una comisaría de Temperley, allá por el 83 cuando caí detenida por no estar vestida acorde a mi sexo y contuvo a mi mamá de aquel gran susto".
Luego confesó que "un día, esa casa se apagó, don Enrique salió rumbo al aeropuerto y nunca tomó el avión pero igual viajó a la eternidad... Volvió en forma de recuerdos y poco a poco, esa casa volvió a encenderse manteniendo viva la memoria y la esencia de don Enrique.. Maite madre trabajaba sin parar y mamá y yo cuidábamos de su casa y muchas veces de los niños".
El reencuentro fue toda una experiencia: "hoy al verlos, volví a vivir un día en esa casa de enfrente y sentí el perfume Poison, volvi a leer los libros de los 5000 poemas más bellos del mundo, recorrí las habitaciones empapeladas y llena de revistas en francés y libros por todos lados, recordé los perros y sobre todos al mirarlos mientras charlábamos descubrí que soy feliz de poderlos tener y a través de ellos, volver a esa niña que algún día fui. Gracias por venir y gracias a mi amado Humberto Tortonese por hacerme reencontrar conmigo siempre".
¡La sencillez de una grande!