Este lunes, la edición central de "Gran Hermano" (Telefe) tuvo de todo. Además de reafirmar la pelea entre Walter "Alfa" Santiago y Ariel Ansaldo, llamó la atención la actitud de uno de los participantes más queridos. Marcos Ginocchio estuvo muy serio y hasta desencajado por momentos.
El salteño se había quebrado en el confesionario del reality, muy triste por la eliminación de Agustín "Frodo" Guardis, al que no pudo salvar de placa. En una semana con liderazgo doble, acordó con Romina ir por Lucila "La Tora" Villar para no inclinarse por sus amigos.
Durante la charla con Santiago del Moro, el "Primo" se mantuvo triste y hasta por momentos, molesto; sobre todo con el abordaje del conflicto entre Alfa y Ariel. Cuando le tocó el turno de responder cómo se sentía, le expresó a Santiago del Moro: "lo positivo (de estar en la Casa) es que por más que tengamos distintos pensamientos, es increíble como podemos llegar a enlazar tanto con gente tan distinta. La negativa es que acá te haces mucho la cabeza...".
Los fans resaltaron que lo vieron muy distinto y hasta incómodo en la gala. Luego de terminar la charla con Del Moro, fue el único que se quedó en el sillón y fue Camila quien se acercó a preguntar cómo estaba.
