Imponente. Así es la edificación que aparece en varias ocasiones a lo largo de la ficción turca "Sen Anlat Karadeniz" y pocos advierten. La novela, que en Argentina se la conoce como "Fugitiva" (Telefe), cuenta con escenarios naturales y arquitectónicos que se conjugan de forma plena y sorprendente.
Los paisajes que propone cada capítulo van desde bosques intensos con enormes montañas hasta el histórico Mar Negro. Se trata de la zona conocida como Sürmene, provincia de Trabzon, en Turquía. Esta ciudad, en la antigüedad, se encontraba cerca de Hyssos e Issiporto y se conocía con el nombre de Susarmia o Augustopolis.
Allí se desarrolla toda la trama que plantea un tema tan duro como la violencia de género, el machismo y hasta el abuso sexual. En la primera parte de la historia, la "maldad" estuvo centrada en Vedat, un empresario que compró a Nefes cuando era una adolescente y la sometió en todos los aspectos. Con ella tuvo un hijo, Yigit, que con se convirtió en la esperanza de la trama.
En la nueva etapa de la historia, que es la que ahora se ve en la pantalla de Telefe, un nuevo personaje vino a superar al anterior, tras su muerte. Se trata de Genco, un empresario que además de cometer violencia contra su esposa, tiene una mirada pervertida con su hijastra de 18 años de edad.
En toda la producción de la novela, no sólo se muestra la acción de los personajes sino también se emiten escenas panorámicas del lugar donde se desarrolla. Y en estos paneos con imágenes aéreas hay una lugar que se muestra de manera imponente y que para los ojos de muchos seguidores de la ficción pasa desapercibido.
Se trata del Monasterio de Sümela, una imponente estructura arquitectónica que está sobre la montaña y cuyas ventanas dan al precipicio. Las escenas de este lugar se muestran todo el tiempo a lo largo de la ficción pero pocas personas saben qué lugar es y su peso histórico.
Este edificio es un monasterio cristiano ortodoxo que comenzó a construirse en el siglo IV dedicado a la Virgen María. Está a los pies de un acantilado frente al valle de Altindere, en la región de Maçka en la provincia de Trebisonda, actual Turquía. Situada a una altitud de aproximadamente 1200 metros, es una importante atracción turística del parque nacional de Altindere.
Durante su larga historia, el monasterio cayó en ruina en varias ocasiones y fue restaurada por varios emperadores. Desde el 2010 se celebran en él ceremonias religiosas.
