Los participantes de Gran Hermano se sumaron a la tradición de armar el árbol de Navidad el 8 de diciembre. Aunque muchos se mostraron entusiasmados por los inminentes festejos de fin de año, hubo otros que se mostraron muy angustiados, ya que a dos meses del inicio del reality, repararon en que pasarán estas fechas especiales alejados de sus seres queridos.
A pesar de que se sabe poco y nada sobre su vida, desde que ingresó a la casa Marcos Ginocchio cuenta que extraña muchos a sus hermanos, que viven en el exterior y a sus padres, que quedaron en su Salta natal. Por eso, al ver el arbolito no pudo evitar quebrarse, pero decidió procesar sus emociones lejos de sus compañeros, solo en el patio.
Por su parte, Nacho Castañares se mostró muy angustiado porque estas serán las primeras fiestas que pase sin su madre, que falleció poco antes del inicio del programa. Y Thiago Medina se acercó a consolarlo y hablar de su propia experiencia, ya que perdió a su mamá cuando tenía 8 años.
"Yo sé que es feo, no querés disfrutar ni nada de eso, pero tratá de darle para adelante. Todo pasa por algo, yo sé que es feo perder un pariente, yo también lo sufrí una banda de tiempo, pero después me di cuenta que hay que ir para adelante", le dijo el joven de González Catán. "No te pongas mal, va a ser re difícil y vas a estar mal, vas a estar bajón, pero todos los que estemos acá vamos a disfrutar", le prometió.
Luego, todos los hermanitos dejaron sus diferencias de lado -al menos por un rato- para decorar galletitas navideñas y empezar a preparar el clima para el festejo de Nochebuena. Cabe señalar que ellos no lo saben, la producción los dejará pasar esa noche con un miembro de su familia, con la condición de que no le den noticias del exterior de la casa. Además, el domingo 25 no habrá gala de eliminación, pero ya el 1° de enero de 2023 volverá a la normalidad la dinámica semanal.