Con un desafío de coreos, TN tuvo la Fiesta de "El Pase" en la madrugada de este sábado. En esta ocasión, el Negro Molinero no estuvo presente ya que se encuentra recuperándose del coronavirus, mientras que Guido Martinez y La Beba acompañaron desde la virtualidad, porque también están aislados.
Para esta oportunidad la fiesta la animaron en el estudio Franco Mercuriali, Juan Buti y Javier Fabracci. Y a la distancia, via on line también se sumó Marcelo Polino.
"Cuales son los ritmos elegidos para esta fiesta", preguntó el ex jurado del Bailando a lo que los chicos del programa le aclararon que tenían preparado música de boliche, dance.
Luego Polino recomendó: "segui mucha actitud, sonrisa a cámara" y les aclaró que "si siguen el corazón, van a terminar todos en el quirófano".
El primero en abrir la pista fue Busti quien lanzó una frase clave que indicó la condición en la que terminó al final de la coreografía: "llámalo a Cresceti".
Al momento de hacer su devolución, Beba le puso un 10 por la actitud que le dio a sus movimientos. Por su parte, Polino destacó que tendría que poner dos notas diferentes. Una para la parte de arriba del cuerpo (que sería 10 por cómo se movió) y otra para la cintura para abajo (sería un cero por lo duro que fue al moverse).
El siguiente en subir a escena fue Javier quien sorprendió a todos. Es que había ensayado la propuesta puesta en la pantalla paralela y la pudo seguir al pie de la letra "como un holograma", según destacaron sus compañeros.
La Beba y Guido destacaron cómo se dedicó a ensayar la coreografía para que todo saliera bien. Pero Polino confesó que esperaba de él "una pasarela". "Eso te da más recorrido a la pista que está bueno", señaló y le puso un 6.
El tercero en bailar fue Franco quien también tuvo varias horas de ensayo de la coreografía y hasta tuvo el vestuario parecido al que ofrecía la imagen computarizada. Para esta oportunidad sus compañeros del Pase le pusieron la mejor nota por cómo manejó el movimiento en la pista. Por su parte, Polino aplaudió el baile de Franco pero reconoció con humor lo duro que es para bailar al igual que sus colegas.
