A mediados de julio pasado, una noticia conmocionaba al m undo del espectáculo a nivel mundial. La estrella de Glee, Naya Rivera murió ahogada en aguas del lago Piru, en California, después de que salió con su hijo a dar una vuelta en bote.
Este fin de semana, se conoció el último informe que da cuenta cómo fueron los minutos previos a su muerte y el dramático momento que quedó grabado en la memoria del pequeño.
El informe compartido por el médico forense del condado de Ventura, que reprodujo diario The Sun, revela que el hijo de Rivera confesó que la actriz contó "1, 2, 3" mientras saltaban del bote y se metían en el lago. Luego, relató que su mamá los empujó de regreso al bote y empezó a levantar los brazos gritando "ayuda".
El documento revelador, y que conmociona al mundo, indica que después de ese pedido de ayuda ella "luego desapareció en el agua".
El cuerpo de la actriz fue encontrado el 13 de julio, 6 días después de que desapareció. El primer examen de autopsia indicó que murió ahogada y que no se registraron rastros de droga o alcohol.
Según el nuevo informe de este fin de semana, Rivera tenía una concentración de alcohol en sangre (BAC) de 0.016, y tenía niveles bajos de anfetamina, cafeína, diazepam, nordiazepam, fentermina.
Rivera tenía una receta para un medicamento en su bolso cuando se encontraron sus pertenencias en el barco en California , junto con tres latas de White Claw.
La intérprete de origen puertorriqueño se convirtió en un rostro muy popular de la televisión por su papel como Santana López en la serie musical "Glee" (2009-2015), que tiene aún multitud de fans en la Argentina y otros países latinos.
La desaparición confirma de algún modo el mote de “serie maldita” que acompaña a “Glee”, tras los sucesos trágicos de algunos de los protagonistas de este formato que se convirtió en un fenómeno de masas en muy poco tiempo.
El primero de ellos fue el protagonista de la serie, Cory Monteith (Finn Hudson), de 31 años, cuyo cuerpo se encontró en 2013 en un hotel de Vancouver, fallecido tras el abuso de alcohol y la heroína.
Cinco años después, Mark Salling (Noah "Puck") se quitó la vida tras ser el centro de un escabroso asunto en el que le declaraban culpable de pornografía infantil y de violación.
En tanto en 2019 se destapó un caso de maltrato por parte de Blake Jenner (Ryder Lynn) a su expareja, también de la serie, Melissa Benoist (Marley Rose).
