Luego de la muerte de su madre, Antonella Olivera, la hija de Natacha Jaitt, se había manifestado el respecto a través de las redes sociales.
Este viernes, la joven de 20 años se presentó en la fiscalía que lleva la causa y luego rompió el silencio en El diario de Mariana. “Estoy destruida”, expuso. Y agrego: “No descarto que haya sido un homicidio”.
Acompañada de su tío Ulises Jaitt, contó que su relación con la fallecida modelo era “como la cualquier hija con su madre”. “Era amorosa, yo no vivía con ella porque vivo en Rosario. Era un sol de persona. Había dos Natachas: una fuerte y otra que necesitaba contención”, resumió.
Luego, Antonella manifestó: “Me molesta la gente que sale a hablar, como Lissa Vera. Decía ser casi hermana de mi madre y ahora habla de adicciones”.
Olivera también apuntó contra Mariano Yospe, quien dijo que luchará por la guarda de Valentino (hijo de Adrián Yospe y Natacha). “Hay gente que viene a reclamar a mi hermano cuando no lo vieron en toda su vida”, sostuvo, al tiempo que pidió que la tenencia del menor quede en manos de Ulises.
Sobre los cuestionamientos a Ulises Jaitt (el más duro fue el que hizo Jorge Rial), Antonella sintetizó: “Ulises era el rottweiler de mi mamá, ella salía y él iba a atrás”.
Fuente: www.eltrecetv.com.ar