Fuentes de Defensa Civil confirmaron hoy que el humo intenso que emana desde hace varios días de un lote baldío en la localidad de Guaymallén corresponde a turbas de antiguos cultivos que había en el terreno y que al quedar secas entraron en combustión, por lo cual se regó con mangueras hidrantes para enfriar y apagar la humareda.
“Han sido terrenos de labranza y cultivo donde quedó mucha turba en el suelo, que se secó por la ausencia de agua y entró ahora en combustión ya que hay muchas raíces y materia orgánica”, explicó hoy a Télam el jefe de Defensa Civil, Daniel Burrieza.
Esta semana, vecinos de la localidad mendocina de Guaymallén, cercana a la capital provincial, denunciaron la presencia de mucho humo que emana desde la tierra de un lote baldío cercano a viviendas particulares, sin que hasta el momento se registren daños, mientras profesionales de geología descartaron que se trate de un incendio subterráneo.
Burrieza descartó que en el sitio haya habido algún movimiento de volcanes o sismo, “según investigaron desde el Servicio Geológico Minero Argentino”.
“La idea es controlar, humectar y que se pare, pero la turba tiene mucha raíz y al estar tan seco se dificulta la tarea, pero es un fuego típico de basural”, señaló.
También indicó que cuando eso dejó de ser un terreno agrícola “la gente dejó de regar e hizo drenajes y quemas clandestinas. El fuego se metió por estos sustratos y ese fuego se ha movido por el terreno sin origen ni final”.
Así “se va consumiendo la materia que hay acumulada, en algunos casos se hacen grietas, sale humo, calor y este fenómeno se caracteriza por no tener llama libre, sino fuego incandescente”, describió el director de Defensa Civil.
Burrieza afirmó que esto “no es fácil de combatir”, y que la Municipalidad de Guaymallén regó con agua en camiones la zona para enfriar y apagar”, mientras se colocó un perímetro para q la gente no ingrese y no se queme los pies”, tal como ocurrió ya con algunos niños y personas.
En esos dos lotes de unos 11 kilómetros, hay unas diez casas habitadas y otras en construcción, pero sólo hay huecos con humo en algunas zonas”, dijo el funcionario.
“Esto comenzó en marzo cuando un operario halló un pozo con fuego y no le dimos mayor importancia, a medida que comenzaron a trabajar el terreno dimos cuenta que había humo en varios sectores y como no sabíamos de qué se trataba y nunca habíamos visto algo decidimos a la municipalidad de Guaymallén quienes vinieron a estudiar el suelo”, dijo hoy a Télam Sergio Sinco, uno de los vecinos y propietarios de una vivienda en el lugar y aun asombrado por el fenómeno.
“Estamos esperando un camión cisterna y a los bomberos para que arrojen más agua en el lugar”, dijeron fuentes de Defensa Civil, que trabajan este mediodía junto a otros operarios del predio y la ayuda de vecinos.