El nombre y apellido del asesino de Karen Daiana Bustamante fue revelado a través de un llamado clave al 911. Una mujer, que vio en la televisión los videos de la causa, reconoció al femicida y aseguró que es su hijo, quien es intensamente buscado por la policía.
"Estaba viendo por la tele sobre un femicidio en Moreno, quiero informar que el presunto homicida es mi hijo, se llama Rodrigo German Rivero, tiene 21 años, es vendedor ambulante y muy agresivo", habría revelado la mujer en un llamado, según consignaron fuentes policiales. "No se donde vive ni donde está en este momento", puntualizó.
Horas después, la Policía allanó la casa de la madre de Rivero y confirmó que él no vive allí, por lo que la búsqueda continuaba este miércoles.
La clave de la investigación del fiscal Gabriel López, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 de Moreno, está en una serie de videos recopilados por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) Moreno-General Rodríguez y de la Comisaría 1°, a través de los cuales descubrieron que la víctima y el asesino se conocían, aunque no se sabe desde cuándo, venían desde la zona de Merlo y pasaron la noche juntos.
Rivero vestía pantalones oscuros, gorra con visera dada vuelta, un buzo y una campera sobre sus hombros cuando acompañó en la madrugada del lunes a Karen a varios bares y pools, según la reconstrucción de los investigadores a través de cámaras de seguridad.
Un minuto más tarde, otra cámara lo captó doblando en una esquina y empezando a trotar para continuar la fuga, mientras la chica aparece 20 segundos después, continuado la persecución.
En un tercer video puede verse cómo el sospechoso agarró de la calle una botella vacía de cerveza, que luego apareció destrozada en la escena del crimen; y segundos más tarde, aparece en cuadro la víctima que venía trotando para alcanzarlo.
A las 5.38 hay una cámara de una vivienda particular que registró el momento en que el hombre comenzó a agredir y asesinó a la víctima en el predio de un salón de fiestas deshabitado. Unos minutos más tarde, a las 5.56, con dos cámaras de una confitería, ubicaron al acuasado, que descartó en un cesto de basura un trozo de baldosa ensangrentado envuelto en una bolsa de arpillera, que fue secuestrado por los peritos.
"Tenemos una última secuencia de videos donde vemos que al asesino subir a un colectivo para el lado de Luján, pero del que se bajó a las ocho cuadras, y comenzó a caminar con rumbo errático hasta que lo perdemos de vista", dijo otro de los investigadores.
Fuente: Crónica
