Tras las pericias de la Policía Federal a los teléfonos de los diez acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa, altas fuentes de la investigación confirmaron a Infobae que el encargado de filmar el macabro video del ataque asesino fue Lucas Pertossi, acusado de ser partícipe necesario del asesinato. Los análisis de la PFA encontraron la filmación en su aparato.
Todavía se desconoce si el video fue viralizado a terceros, algo que surgirá de las comparaciones entre los resultados de las pericias que fueron entregadas por la PFA a la fiscal Verónica Zamboni esta semana. Las fuentes consultadas no detallaron la duración del video, aunque se sabe que fue filmado en alta resolución.
Hoy por la mañana, abogados de la querella liderada por Fernando Burlando se dirigirán a la UFI número 6 para copiar el material con discos rígidos externos. “Son varios teras de archivos”, afirmó una fuente del caso. El video del ataque, así como las otras filmaciones encontradas, fueron entregadas en un formato forense especial que impide su alteración o edición. Lo que encuentren tanto la querella como la defensa de los rugbiers será esencial para fortalecer sus eventuales decisiones de hablar o callar.
Lucas Fidel Pertossi, primo de los acusados Ciro y Luciano Pertossi, tiene 20 años y está registrado desde mediados de 2018 en los rubros de la AFIP orientados a arquitectura, ingeniería y servicios técnicos. Desde marzo integra una SRL dedicada al rubro de la que es empleado, según el Boletín Oficial provincial. También es socio de la firma, junto a una mujer de 49 años, registrada en una calle de San Jacinto, el barrio de su familia en Zárate. Los registros previsionales revelan que Lucas comenzó a recibir aportes cuatro meses antes del crimen.
“Yo soy técnico en seguridad e higiene, no se cómo voy a hacer con el laburo”, expresó preocupado en un audio que se difundió hace semanas en el que se refirió a lo sucedido aquella madrugada en la que junto a sus amigos atacaron a Báez Sosa. “Salimos a divertirnos y la vida nos jugó una mala pasada, pero no por eso me voy a condenar, ni me voy a entregar”, se lo escucha decir en la grabación.
Él había sido también quien había escrito en sus redes sociales antes de iniciar sus vacaciones: “Fua no falta nada para irnos a Gesell con los pibes, a romper lo que nos faltó el año pasado”. Tras quedar detenido, todos los perfiles de redes sociales de Lucas fueron eliminados. Sin embargo, la captura fue viralizada por usuarios que repudiaron el episodio.
En diálogo con Infobae, la abuela de los tres jóvenes que practicaban rugby en el club Arsenal Náutico de Zárate se mostró conmocionada por la situación: “No entiendo por qué hacen esto. Quizás mis nietos andan en la joda, pero no son ignorantes. Tuvieron educación, no les faltó escuela, fueron al mejor secundario de acá”, repasó. Según vecinos de Zárate, los jóvenes eran conocidos porque solían protagonizar episodios violentos.
“Dice que me extraña, que se siente muy mal y que está muy arrepentido porque la pelea se les terminó yendo de las manos”, dijo en tanto Karen, la novia de Lucas Pertossi desde hace seis años. "Estoy muy triste porque conozco a todos los chicos que están presos. También entiendo a la familia del chico que falleció: no me imagino lo que será estar en sus zapatos”, indicó la joven en una entrevista televisiva.
El análisis en los celulares fue realizado por la División de Operaciones Técnicas de la Agencia Regional de la Policía Federal en su laboratorio de la ciudad de Mar del Plata, mediante el UFED (Universal Forensic Extraction Device), un dispositivo que sirve para extraer y decodificar la información de la gran mayoría de teléfonos del mercado. Los análisis contienen todo lo que había en los aparatos, esto es: fotos, videos y transcripciones de chats. La PFA suele separar lo que observa como contenidos relevantes a la causa en transcripciones, pero este no habría sido el caso.
En total fueron diez los dispositivos a analizar, según datos publicados por Télam. Entre ellos, el teléfono de Pablo Ventura, el joven que fue falsamente involucrado por los rugbiers detenidos y que luego fue liberado y sobreseído por la Justicia, al comprobarse que no estuvo en la ciudad costera al momento del brutal ataque a Fernando. Seis de esos equipos, los marca Apple, son más difíciles de desbloquear para los especialistas porque su grado de encriptación dificulta el acceso a la información interna.
Esos aparatos pertenecen a Máximo Thomsen (20) -uno de los acusados de ser coautor del homicidio-, Lucas (18) y Luciano Pertossi (18), Matías Benicelli (20), Alejo Milanesi (20) y Juan Pedro Guarino (19), siendo el equipo de este último un “7 Plus”, de color negro, con la pantalla astillada y una funda de los All Blacks.
A pesar de que la querella de la familia Báez sostuvo que a los rugbiers podría caberle la acusación de haber cometido el crimen por placer, hasta el momento la Justicia sostiene la calificación actual: homicidio agravado por concurso premeditado de dos o más personas.
“Si graban peleas y luego se regocijan de observarlos o subirlos a las redes sociales, apunta a ese placer o ese gusto que está en el Código Penal. Son asesinos diferentes. No hay muchos antecedentes en la historia judicial de que se haya condenado con este agravante”, sostuvo esta mañana Fernando Burlando. “Vamos a pedir una pericia psiquiátrica y psicológica para los diez rugbiers. Este gusto, este placer, este sadismo por matar se puede comprobar a través de una pericia a cada uno de los detenidos”
Mientras tanto, la fiscal Zamboni deberá presentar en los próximos días el pedido de prisión preventiva para resolver la situación en la cárcel de los diez de Zárate. Tiene plazo hasta el 16 de este mes, cuando se cumplirá el período previsto por ley de los 30 días posteriores a la detención. Una vez confirmada, los acusados dejarán la cárcel de Dolores y es probable que sean trasladados a la Unidad N°57 en Campana, un penal para detenidos jóvenes de 18 a 21 años, mayormente por robo a mano armada.
“El ministro de Justicia de la provincia, Julio Alak, ya me garantizó que los rugbiers no tienen privilegios ni situaciones extrañas. Sí, obviamente, las condiciones humanas que corresponden para que lleguen de la mejor manera al juicio oral”, agregó el abogado querellante.
Fuente: Infobae