Tras la confirmación de la prisión preventiva para 8 de los 10 rugbiers acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell, dos de los imputados podrían sufrir la agravación de la imputación que les corresponde en las próximas horas.
En un principio, la fiscal Verónica Zamboni consideró a Ciro Pertossi y Máximo Thomsen como coautores del asesinato, mientras que al resto de los rugbiers los imputó por ser partícipes necesarios del crimen. Sin embargo, otros dos de los detenidos también serían imputados como coautores del asesinato en las próximas horas: Enzo Comelli y Matías Benicelli.
El rol que cumplió cada rugbier en la paliza mortal será reevaluado próximamente cuando los imputados sean indagados nuevamente. Las ruedas de reconocimiento y las últimas pruebas incorporadas a la causa comprometen particularmente a Comelli y Benicelli, quienes también serán considerados coautores del crimen.
Según indica La Nación, un testigo no dudó en identificar a Comelli como el agresor al que vio patear repetidas veces a Fernando. Otro testigo lo señaló golpeando a la víctima mortal, sin detallar si se trató de puñetazos o puntapiés. Y en un tercer caso fue señalado como alguien que estaba muy cerca del cuerpo del adolescente asesinado, sin poder especificarse en ese testimonio si Comelli arremetía o no a patadas contra Fernando. Un cuarto joven convocado por la fiscalía lo individualizó como el responsable de arengar a sus amigos a participar de la golpiza.
En cuanto a la situación de Benicelli, quien sostenía su cabello con un rodete al momento de la agresión, dos testigos lo identificaron como uno de los agresores pateó a Fernando en el suelo. Otra declaración brindada segundos después de reconocer a ese sospechoso, se refirió al momento en que Benicelli gritó a la inconsciente víctima: "A ver si volvés a pegar, negro de mierda".
Aunque parecería visualizarse a Comelli como el posible autor de la patada final que se observa en uno de los videos que se hicieron públicos y que figuran también en la causa, será imposible comprobar si un solo golpe causó la muerte de Fernando o si fue la acumulación del castigo. En consecuencia, los cuatro que figurarían como agresores directos tendrán el mayor peso de la imputación.
