Las elecciones en Santa Fe podrían tener este domingo un impacto en el panorama político nacional. El socialismo de esa provincia, encolumnado tras la candidatura presidencial de Roberto Lavagna, busca sostener su dominio en esa jurisdicción, ante el senador peronista Omar Perotti.
Las primeras cifras oficiales marcaban que, con poco más del 60% escrutado, Perotti sacaba una leve diferencia sobre el postulante del oficialismo. El candidato justicialista superaba el 40% de los sufragios tras el recuento de las primeras mesas. Segundo se ubicaba Bonfatti, con 36,44% y en tercer lugar el representante de la Casa Rosada, con 18,71%.
El padrón santafesino representa el 8,36% del electorado nacional y constituye uno de los distritos “grandes”, el tercero, después de Buenos Aires (37%) y Córdoba (8,7%).
El Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS), que compite por su cuarto gobierno consecutivo, incluye a socialistas y a un sector del radicalismo y se presenta con la lista “Adelante”, que propone la fórmula compuesta por Antonio Bonfatti, quien fuera gobernador entre 2011 y 2015, y la diputada provincial María Victoria Tejeda.
Omar Perotti aparece como su principal competidor. Los dos candidatos del peronismo, junto a María Eugenia Bielsa, fueron los que mayor cantidad de votos sumaron en las PASO provinciales, con 42%. El oficialismo había obtenido el 31%.
Si se produce el traslado más predecible y sus votos pasan a quien fue su adversario en las PASO, el senador Perotti, podría poner seriamente en jaque la posibilidad de que el socialismo siga al frente del Ejecutivo provincial.
Esto también podría tener implicancias a nivel nacional, ya que el espacio Consenso 2030, que lidera Roberto Lavagna tiene tres pilares: el exministro y el sector del peronismo que lo respalda, el GEN de Margarita Stolbizer, y el socialismo santafesino, liderado por Miguel Lifschitz.
Fuente: TN.
