Violencia

La mujer que mató a su esposo dijo que la obligaba a prostituirse y se escondía para mirarla

Relató ante una fiscal que ese fue uno de los motivos que desencadenó una pelea fatal.
miércoles, 13 de marzo de 2019 00:00
miércoles, 13 de marzo de 2019 00:00

La mujer detenida por el crimen de su esposo en la localidad bonaerense de José C.Paz aseguró que su marido la obligaba a prostituirse sobre la ruta 8, para lo cual le compraba ropa y preservativos, luego se escondía entre los arbustos para observar lo que hacía y finalmente le exigía el dinero que le pagaban.

Estos datos surgen de la declaración indagatoria que Paola Elvira Córdoba (38) prestó ante la fiscal de Malvinas Argentinas Silvia Bassani, a quien le relató que ese fue uno de los motivos por los que comenzó a discutir con su esposo el sábado pasado y luego terminó matándolo.

"El empezó a decirme 'mirá Paola que tenemos que irnos para allá de nuevo'. Eso era la ruta 8, en el último tiempo era un lugar fijo, es una campo arbolado. Yo le dije que no quería ir más. Me dijo que yo tenía que ir porque tenía hijos a los que darle de comer, que era mi forma de ayudar en casa", contó la mujer.

Según Córdoba, pese a que debajo de su casa trabajaban en un lavadero de autos y kiosco, su marido, Alberto Elvio Naiaretti (46), le decía que el dinero no alcanzaba y ella se tenía que prostituir "para darle de comer a la familia".

"Me pegaba, me amenazaba que me iba a matar a mi hijo más chico, que era el más pegado a mi, y me dijo muchas veces 'te voy a pegar donde más te duele'", aseguró Paola al declarar ante la fiscal.

Consultada sobre cómo era que su marido la obligaba a prostituirse, aseguró que le compraba la ropa, los preservativos, la llevaba de la mano, ella se tenía que cambiar entre medio de los arbustos, salir y subirse a un auto.

"Yo les decía a los autos el lugar donde tenían que parar... él miraba a través de los arbustos y después me pedía la plata", relató Córdoba, quien recordó que dos veces le pidió a los hombres con los que estaba que la sacaran de allí, pero uno la bajó a las seis cuadras y su marido la encontró.

"Estaba enojado porque había parado el auto más adelante de donde él me decía y porque él no vio nada. Me agarró del brazo y me dijo 'puta de mierda, lo querés disfrutar sola'", agregó.

Fuente: Télam

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