En su extensa declaración ante el fiscal federal Carlos Stornelli, Víctor Manzanares, el histórico contador de los Kirchner, dijo que la la expresidenta Cristina Kirchner "estuvo al tanto de todo" desde la muerte de su esposo Néstor Kirchner. Además declaró que las sociedades Los Sauces y Hotesur se crearon para realizar maniobras de lavado de dinero. Manzanares pidió convertirse en arrepentido en la causa de los cuadernos de las coimas y el juez federal Claudio Bonadio debe definir si lo acepta o no como imputado colaborador.
El excontador de los Kirchner está procesado con prisión preventiva en esta investigación, en el tramo sobre las operaciones de lavado del exsecretario privado de Néstor Kirchner Daniel Muñoz por operaciones en los Estados Unidos por al menos U$S 70 millones. También están procesados con preventiva por esta investigación la viuda de Muñoz Carolina Pochetti y el exfuncionario K Juan Manuel Campillo, entre otros.
Manzanares señaló a los expresidentes como jefes de la estructura de los ilícitos y dijo que Muñoz trasladaba y recibía plata en el departamento de Uruguay y Juncal en Recoleta donde vive la senadora de Unidad Ciudadana, y que parte de esos fondos serían de coimas de contratistas del Estado. Aseguró que desde la muerte del expresidente Cristina "estuvo al tanto de todo".
Declaró que tanto la inmobiliaria Los Sauces como la sociedad Hotesur, que controla el hotel Alto Calafate, se crearon con la misión de "lavar dinero". Por estas dos empresas se tramitan dos causas en la justicia federal.
En relación a Los Sauces explicó que se simularon alquileres para lavar plata y mencionó a los empresarios K Lázaro Báez y Cristóbal López -actualmente detenidos- que aseguraron la mayor parte de los ingresos de la compañía. Además habló sobre Máximo Kirchner, del que dijo que cobraba cheques por adelantado por los alquileres de los hoteles, consigna Clarín.
Sobre Hotesur dijo que también hubo simulación de operaciones para lavar plata y que Báez armó una empresa para administrar los hoteles y alquiló habitaciones que nuna ocupó, mientras era el mayor contratista de olbra pública en Santa Cruz.
Manzanares declaró además que los negocios de Muñoz -que murió en 2016- fueron de U$S 150 millones solo en la Argentina y que en 2009 negoció con el entonces juez federal Norberto Oyarbide para sobreseer al matrimonio presidencial en una causa por enriquecimiento ilícito.
Según el excontador de los Kirchner solo en el país tanto Pochetti como Muñoz tenían negocios que ascendían a los U$S 150 millones en el rubro farmacéutico, inmobiliario, transporte e insumos para hospitales.
Además dio detalles de cómo se lavó todo ese dinero sumado a las propiedades que se compraron en el extranjero ya que ocupaba una posición clave: además de ser contador de Muñoz era presidente de varias de las empresas a su nombre.
También explicó cómo fue la maniobra para que Oyarbide sobreseyera en 2009 al matrimonio presidencial, investigado por enriquecimiento ilícito al haber aumentado su patrimonio en 158%. Asistido por los abogados Roberto Herrera y Alejandro Baldini, dijo que primero tuvo una reunión con Néstor Kirchner y que éste le encomendó ver a Oyarbide, con el que luego se reunió. De acuerdo a su declaración el juez le pidió que se reuniera con el perito oficial para realizar el estudio contable a partir del cual terminó sobreseyendo a Néstor y Cristina Kirchner por enriquecimiento ilícito.
Manzanares dijo que por esta cuestión viajó unas once veces a Buenos Aires durante esa fecha, fines de 2009. Declaró también que mantuvo varias reuniones con Oyarbide en su juzgado, y que el exmandatario lo llamaba para ver cómo le había ido. Por lo pronto espera que Bonadio homologue su declaración como arrepentido y sigue detenido en el penal federal de Ezeiza.