El Gobierno argentino por ahora no reconocerá a Jeanine Áñez como presidenta provisional de Bolivia. Sólo la reconocerán como "autoridad del Senado", donde ocupaba el cargo de vicepresidenta segunda hasta que este martes fue proclamada como la sucesora interina de Evo Morales.
De esta manera, el presidente Mauricio Macri se diferencia del presidente estadounidense Donald Trump y de su par brasileño Jair Bolsonaro, quienes sí reconocieron a Áñez como presidenta.
"No podemos hacer ninguna mención a su presidencia provisional hasta que no se entienda quién y qué la sostiene. Por el momento evaluamos el estatus de la senadora", dijo una autoridad del Gobierno.
"Los hechos se tienen que calmar, también la situación y convocar a elecciones", agregó la fuente oficial.
Mauricio Macri y su gobierno fueron cambiando de posición con respecto a la renuncia de Evo Morales. En las primeras horas del lunes, el canciller Jorge Faurie dijo que no existió golpe de Estado contra Morales.
Tras el fuerte contrapunto con el presidente electo, Alberto Fernández, que sí consideró que en Bolivia hubo un golpe de estado al igual que muchos radicales, Macri fue cambiando de opinión.
"Quiero dejar en claro que repudiamos la violencia de cualquier tipo y bajo cualquier circunstancia. Creemos en el diálogo como único mecanismo de salida de cualquier crisis que pueda tener una Nación", dijo ayer Macri.
Tanto Estados Unidos como Brasil ya reconocieron a Áñez. "La presidenta en funciones del Senado ha asumido las responsabilidades de presidenta interina de Bolivia", escribió en su cuenta de Twitter Michael Kozak, encargado de la región Latinoamérica en el Departamento de Estado de Estados Unidos.
