Famosos por su tamaño y por el particular slogan con el que se los publicitaba, los alfajores Grandote se transformaron en una golosina clásica para los argentinos, pero la empresa que los fabricaba cerró sus puertas al no poder soportar la crisis económica que atraviesa el país bajo el gobierno de Mauricio Macri.
Este martes, cuando los trabajadores llegaron a la fábrica perteneciente a la empresa alimenticia La Nirva en Lomas del Mirador, partido de La Matanza, se encontraron con las puertas cerradas. La primera reacción fue instalar una carpa para exigir la continuidad laboral, pero el panorama viene complicado desde hace meses.
El grueso de los operarios no percibe su salario desde hace dos meses y medio además del aguinaldo y en gran parte se debe a que la producción del clásico alfajor está prácticamente parada por la caída del consumo.
“Hace 5 quincenas que no cobramos, nos deben el aguinaldo", denunció uno de los delegados, Marcelo Cáceres. "Antes del empeoramiento de la crisis eran 140 personas las que trabajaban para esa compañía, pero terminaron quedando solo 65 y nos deben unos 80 mil pesos”, confió.
Fuente: MDZ