La Asignación Universal por Hijo es una prestación que las mamás cobran hasta que los chicos cumplen 18 años (mayoría de edad).
Sin embargo, el trámite no es tan exacto en el tiempo ya que se sigue percibiendo el beneficio al menos dos meses después del cumpleaños del chico. La razón es que se abona por mes atrasado y se paga también el retroactivo retenido. Luego de eso, se da de baja al beneficiario del sistema de Anses de manera automática.
A partir de los 18 años, pueden acceder a otra prestación como el programa Progresar, en caso que los hijos sigan estudiando.