miércoles, 20 de abril de 2016
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El responsable de la empresa organizadora de la fiesta electrónica en Costa Salguero, donde murieron cinco jóvenes por ingesta de drogas dentro del predio, no se entregará a la Justicia, mientras el fiscal pidió la indagatoria de personal de Prefectura y de seguridad privada "por hacer la vista de gorda" sobre la distribución de estupefacientes.
Adrián Conci, dueño de Dell SA, empresa organizadora del evento Time Warp, donde murieron cinco jóvenes presuntamente por ingerir varios tipos de drogas de diseño, "no se presentará a la Justicia ya que este miércoles vamos a apelar el rechazo a la eximición de prisión dictado por el juez Casanello", dijo a Télam su abogado Fernando Burlando.
El magistrado rechazó el planteo de exención de prisión de Conci, por la gravedad del delito que se le imputa y la alta pena prevista, mismos argumentos usados por el fiscal cuando pidió que se le niegue ese beneficio y ordenó su detención, por lo que para el magistrado Conci está prófugo hasta que no se resuelva la apelación.
Burlando, en tanto, sostuvo a Télam que su defendido "no tiene nada que ver con los narcotraficantes" y que tampoco esta relacionado con que se halla cortado el agua en los baños a las 4 de la mañana, elemento que los chicos buscaban supuestamente en su necesidad de hidratarse por el consumo de las drogas de diseño.
Casanello también envió un oficio a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, en el que advirtió que investigará si Prefectura intenta obstaculizar la investigación y salió al cruce de afirmaciones de miembros de esa fuerza que aludieron a supuestas instrucciones dadas desde su juzgado sobre cómo proceder en la custodia del evento.
"Había un tipo de connivencia o coordinación entre el personal de seguridad privada contratada para el evento y el personal de Prefectura Naval Argentina, que hicieron la vista gorda para que la fiesta continuara", advirtió el fiscal Delgado en el dictamen donde pidió indagar al prefecto Alberto Pandiani, al jefe de servicio subprefecto Adrián Álvarez y a la cabo segunda Ivana Gómez.
El fiscal delgado pidió además la indagatoria de quien figura como titular del predio Costa Salguero, Néstor Bogado, de quien figura como apoderado de Dell Producciones, Maximiliano Ávila y del encargado de seguridad de la empresa Siseg, Ezequiel Venturino.
Y se reclamó la indagatoria del responsable del plan de evacuación, Carlos Garat, y de funcionarios de la Dirección de Fiscalización y Control del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que suscribieron el acta 19439 el 15 de abril a las 19, que habilitó la realización de la fiesta.
En cuanto al prefecto Pandiani, Delgado remarcó que el efectivo tenía en su poder una "bolsa llena de sustancias estupefacientes" a las 3 de la madrugada, secuestrada a quienes ingresaban y no hizo nada al respecto.
"Debería haber actuado en el momento en que llegó a su poder" la bolsa "y no lo hizo".
"¿Podría haber evitado la tragedia? Nunca lo sabremos. Pero sí es una clara muestra de cómo estaban dadas las condiciones para que la fiesta continuara sin importar las consecuencias", agregó el fiscal.
También pidió identificar y citar como acusado a un hombre apodado "el chino", quien fue mencionado como encargado de la seguridad interna del evento.
Delgado aseguró que la droga "abrazaba a los chicos que entraban al predio" y graficó que las pastillas "se compraban como los choripanes en una cancha de fútbol".
"El hecho es muy grave, tiene semejanzas muy llamativas con Cromañón, en otra escala, pero esto no pasa solamente porque un par de personas venden drogas sino que hay otro tipo de condiciones que la hacen posible", manifestó Delgado en declaraciones a radio Nacional.
"Lo que planteamos al juez (Sebastián Casanello) es que hay que investigar las muertes, la venta de droga, pero también si hubo condiciones que hicieron posible que esto pase", añadió.
"Todos los testigos cuentan que no había personas camufladas o santo y seña para conseguir pastillas, sino que era casi como comprar un choripán en la cancha", graficó.
"Los patrones comunes son que la droga los abrazaba, que había hacinamiento, poca ventilación y hubo una regulación en la necesidad de hidratarse de la gente porque el agua empezó a escasear a medida que subía la temperatura y que había más gente", manifestó.
Reiteró además que esta agua embotellada bajo la marca Block "empezó a aumentar en precio y en la caja decían que no tenían cambio por lo que en un momento lo que valía 20 pesos se terminó pagando 100".
Anoche, el juez Casanello ordenó allanar la empresa Energy Group, fabricante del agua Block, que también es segunda marca de la energizante Speed, ambas comercializadas durante la fiesta.
En tanto, tres de los jóvenes intoxicados durante la fiesta Time Warp el sábado pasado, continúan internados en el Hospital Fernández "muy graves", afirmó Ignacio Previano, director del centro médico.
Además, el paciente internado en el Hospital Rivadavia se encuentra estable y el que estaba en el Hospital Argerich "fue trasladado al Hospital Británico por decisión de su familia", informó el titular del SAME, Alberto Crescenti.
Fuente: Télam
