Franco Macri aseguró que le dijeron que si su hijo "ganaba lo iban a matar"

A Franco Macri, uno de los empresarios más influyentes del país y padre del presidente Mauricio Macri, le preguntaron en qué se diferencia manejar una empresa de manejar un país. Él respondió que no hay casi ninguna diferencia porque todos los elementos de un país están en una compañía, lo que cambia es la magnitud. "Un país es una empresa. Si no sabes conducir una empresa no puedes conducir un país", dijo.

Macri señaló en Odisea Argentina que nunca estuvo de acuerdo en que los dirigentes se basen solamente en conceptos políticos y no en una planificación lógica. "Pero no se nace empresario, creo mucho en la enseñanza", sostuvo.

El empresario ítaloargentino atribuyó la interpretación de que él no quería que Mauricio Macri dirija el país a una declaración que hizo durante una reunión en China. "Me hicieron preguntas sobre Mauricio y la política y yo contesté algo que quedó medio grabado: que con el corazón no quisiera que fuera presidente, pero con la mente sí", recordó.

Franco Macri aseguró que siempre se llevó óptimo con su hijo, y aclaró que él rechazaba que fuera presidente porque es un sacrificio demasiado grande. "Toda mi vida lo tuve al lado, inclusive en momentos difíciles como el secuestro. Ha sido una persona coherente que se preparó intensamente y estuvo aprendiendo todo el tiempo", opinó.

Con un dejo de nostalgia, el padre del líder del PRO reflexionó que su hijo, en definitiva, es lo que quiso ser.  El empresario manifestó que el mandatario se fue de las empresas familiares muy pronto, hizo su camino por su cuenta, y "llegó donde llegó".

También, opinó que el Presidente heredó un país difícil y contó que cerca de las elecciones tuvo un problema de salud por el temor que le generó que su hijo pudiera ganar. "Me habían dicho que había tipos del otro lado que habían dicho que si él ganaba lo iban a matar. Lilita (por Elisa Carrió) también decía eso", dijo.

Macri hizo una autocrítica al sector empresario cuando dijo que él votó al expresidente Néstor Kirchner. "No había nadie, por lo menos era un desconocido", señaló. Y opinó que desde la presidencia de Arturo Frondizi en adelante todos los gobiernos destruyeron el país. "Mi opinión lamentablemente es que tuvimos gobiernos malos. Pero por qué no nos preguntamos si hubo empresarios buenos. Nosotros somos los que tenemos que dar el ejemplo, el apoyo y marcar el camino", indicó.

El ejecutivo tenía una relación muy cercana con Jorge Bergoglio antes de que sea Papa. Según contó, almorzaban o cenaban una vez por mes y siempre Francisco le pedía que le hablara de la mentalidad de los empresarios, de cómo veía que se hacían las cosas.

"Para mí era un placer y un honor. Hay algo que dejé pendiente: no lo vi más después de que fue Papa" , confesó. Y contó que  después de que Mauricio Macri se reuniera con el Pontífice empezó a escribirle una carta que finalmente abandonó. "Espero visitarlo cuando vaya porque sé que él apoya muchísimo a Mauricio", dijo.