jueves, 4 de febrero de 2016
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Guillermo Moreno está en etapa de su propia reconstrucción. Luego de convertirse en el funcionario más desprestigiado de la administración Kirchner (en todos sus mandatos), el exsecretario de Comercio Interior quiere disputar la conducción del PJ, un hierro caliente tras la derrota electoral del año pasado.
Mientras prueba suerte dentro del peronismo con su agrupación 'La Néstor Kirchner', Moreno carga con la condena social de haber sido una de las figuras más revulsivas del gobierno anterior. En Mar del Plata sufrió los abucheos de los comensales de la confitería Boston que no soportaron la presencia del otrora "supersecretario".
Ocurrió hace unos días y así lo retrató el 31/01 el portal local Noticias & Protagonistas en su sección 'Malas Lenguas': "El ex secretario de Comercio Guillermo Moreno vino a Mar del Plata a dar una charla política. Estaba junto a su séquito en la confitería Boston de avenida Constitución, tomando un cafecito que terminó extemporáneamente. El hombre que se jacta de haber manejado a su antojo a los empresarios en su gestión debió abandonar raudamente la citada confitería ante la gritería de los presentes que repudiaron su presencia con fuertes epítetos. Guapo que huye sirve para otra charlita".
Desde la confitería confirmaron el paso del ex agregado económico de la embajada argentina en Roma por el local, pero minimizaron el episodio diciendo que sólo esperó sin llegar a consumir algo; y que se trató de un hecho que sucede con cualquier "figura reconocida", sin llegar a tratarse de un clásico "escrache".
Más malas noticias para Moreno
El juez Claudio Bonadio lo citó a declaración indagatoria por el reparto de cotillón con la leyenda "Clarín Miente". El exfuncionario fue convocado para este jueves 11/02, según ese mismo medio.
Bonadio había sido apartado del caso, pero la Cámara Federal lo repuso en los últimos días de 2015.
Cuando era secretario de Comercio, Moreno había ordenado desplegar grandes carteles contra Clarín en el Mercado Central y en la fachada de la Secretaría de Comercio. También se repartieron globos y otros artículos de cotillón con frases como "Clarín miente”.
En un principio, Bonadio había archivado la causa. Esa decisión fue confirmada por la Sala I de la Cámara Federal. Pero en julio de 2014, la Cámara de Casación Penal revocó ese fallo y dejó a Moreno al borde de la indagatoria. Los jueces Gustavo Hornos, Juan Carlos Gemignani y Mariano Borinsky consideraron, en ese entonces, que se había archivado sin suficiente fundamentación. Y le ordenaron al juez que reabra el expediente, en el que se investiga si Moreno cometió el delito de "intimidación pública”.
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