Encuesta

¿Sorpresa?, Argentina entre los diez países con menor ética empresarial

Se trata de un relevamiento realizado por el Foro Económico Mundial en el que empresarios calificaron el nivel de transparencia de las compañías en sus naciones.
sábado, 27 de junio de 2015 13:04
sábado, 27 de junio de 2015 13:04
Angola es el país con los empresarios más corruptos del mundo, según el Reporte de Competitividad Global 2014-2015, que elabora el Foro Económico Mundial. Lo interesante del estudio es que les pregunta a los propios empresarios qué puntaje le ponen a la ética corporativa vigente en sus países.

La nación africana promedia 2,6 puntos sobre 7 posibles. En segundo lugar está Mauritana, con 2,7; y tercero está Paraguay, con 2,9.

Completan la lista Líbano (2,9), Bangladesh (2,9), Venezuela (2,9), Argentina (3), Guinea (3,1), Haití (3,1) y Burundi (3,1). De los diez, cuatro son africanos y otros cuatro, latinoamericanos. Los otros dos, asiáticos.

El que tiene un desempeño ético más destacado es Nueva Zelanda, con un puntaje medio de 6,5. Lo siguen Finlandia, con 6,4, y Singapur, con 6,2.

Lo curioso es que los tres integran regiones completamente distintas del planeta, y tienen culturas con muy poco en común. Sin embargo, coinciden en que son sociedades integradas, con altos niveles de institucionalización y respeto a las normas. No casualmente, están entre los países de mayor desarrollo y mejor calidad de vida.

Luego aparecen Dinamarca (6,2), Suiza (6,2), Noruega (6,2), Japón (6), Luxemburgo (6), Qatar (5,9) y Holanda (5,9).

Este estudio es una prueba de que la corrupción es, habitualmente, un problema que atraviesa a toda la sociedad. Cuando las instituciones son débiles y lo que prima es la anomia, la transgresión y la búsqueda del beneficio propio sin contemplar ningún tipo de norma se vuelven prácticas frecuentes en todos los ámbitos: en la administración pública, en el sector privado y al nivel más llano de los ciudadanos en su vida cotidiana.

Un problema multifacético
La corrupción en el mundo empresarial se manifiesta de distintas maneras. Las más habituales se producen cuando los privados tienen negocios comunes con el Estado.

"El punto más fuerte es el pago de sobornos al sector público, pero también ocurre en las negociaciones entre privados, algo que a veces no es tan evidente. Después hay otros fenómenos, como los acuerdos entre competidores para distribuirse mercados y fijar precios, lo que se conoce como cartelización. En ese caso, la gran damnificada es la sociedad, porque se queda sin opciones para elegir el mejor producto y la oferta más conveniente", dice a Infobae la abogada colombiana Dilia Paola Gómez Patiño, directora de la línea de investigación sobre Seguridad del grupo de Derecho Público de la Universidad Militar Nueva Granada.

"Otra forma en que se manifiesta es cuando los empresarios logran incidir sobre la toma de decisiones en el Estado, cuando las empresas van más allá del lobby, y logran de alguna manera comprar esas determinaciones. Es algo muy grave, porque deja lo estatal al servicio de los particulares", agrega.

El mejor ejemplo del primer caso, cuando hay colusión entre empresarios y agentes gubernamentales, son las licitaciones públicas. Es muy frecuente en países de baja institucionalidad que las compañías constructoras, por ejemplo, tengan que pagar un monto en negro para adjudicarse las obras más jugosas.

Fuente: Infobae.

Comentarios