domingo, 21 de junio de 2015
10:43
domingo, 21 de junio de 2015
10:43
Ocho años después, el podio de precios cambió radicalmente. Lejos de cerrar la lista, la Argentina está segunda entre los países con combustibles más caros de la región, sólo detrás de Uruguay. Hasta marzo, el litro de súper costaba $ 11,9, 28% más que en Brasil, 20% por encima de Chile y Perú, y 47% más que en México.
Las comparaciones están hechas a partir de la conversión de los precios de cada país de dólares corrientes a pesos corrientes y se desprenden de los informes de precios de los últimos años que hace la consultora Montamat & Asociados. Una historia casi calcada se repitió con el gasoil.
Los precios de los combustibles se colaron en una reunión de petroleros el miércoles pasado. A propósito de una presentación, el consultor Eduardo Barreiro le comentó al presidente de Shell, Juan José Aranguren, que según su criterio deberían ser aún mayores en la Argentina. Aranguren le respondió con otro deseo: "Yo quisiera que los impuestos fuesen más bajos", le dijo.
El peso del Estado en los surtidores es una molestia que aqueja a todo el sector. Si se le descontaran los gravámenes a las naftas y el gasoil (se llevan casi 50% del precio de venta), la Argentina conservaría, según números de marzo, el segundo lugar entre los países de la región con combustibles más caros, detrás de Uruguay, pero con diferencias mucho más cortas con los demás, en algunos casos, de apenas centavos.
Más aún. Según YPF, en junio los combustibles sin impuestos mejoraron la posición de la Argentina. En promedio, el litro de súper a nivel nacional cuesta $ 7,5, más que en Brasil y Chile, pero menos que en Perú.
Con la estatización de YPF, la necesidad de dotar de recursos a la empresa y la asimilación de ese concepto por parte del ministro de Economía, Axel Kicillof, el Gobierno se mostró más propenso a autorizar subas.
Fuente: Territorio Digital