El caso conmociona no sólo a los vecinos de la localidad de Centenario de Neuquén sino también de todo el país. Una perrita callejera, a la que le pusieron como nombre Milagros, murió este miércoles como consecuencia de la lluvia de balazos que cayó en su cuerpo hace menos de una semana.
El hecho agresivo sucedió el 10 de junio pasado y tuvo como protagonista a un policía de Río Negro que le tiró cinco balazos al animal aduciendo que éste había atacado a su perro. Milagros hacía 15 días había tenido cachorritos y los estaba cuidando cuando uno de estos fue también alcanzado por las balas y murió en el acto.
Por este caso, el policía fue suspendido y el fiscal Horacio Maitini de donde ocurrieron los hechos, ordenó una autopsia de la perrita para encontrar proyectiles en el cuerpo y así reforzar las pruebas que pudo reunir en estos últimos días.
Según publicó diario Clarín, la perra no pudo reponerse a las graves heridas que sufrió en su hocico, destrozado por los disparos. La justicia investiga este caso y al efectivo policial por abuso de armas.