martes, 8 de diciembre de 2015
09:07
martes, 8 de diciembre de 2015
09:07
La Subsecretaría de Minería e Hidrocarburos de Neuquén informó que en octubre pasado la producción de petróleo no convencional (shale oil y tight oil) alcanzó una marca de 132.602 metros cúbicos, con un promedio de 26.905 barriles por día, lo que representa una marca 7,5 veces superior a la registrada a principios del año 2013. Esta situación permitió que a pesar de que disminuyera la producción de petróleo convencional, el total neuquino continúe en crecimiento, tras la fuerte caída registrada en los últimos 15 años que fue más del 65% en ese período, para retomar la senda alcista en el 2014 con el desarrollo de la formación Vaca Muerta.
De esta manera, la producción total de petróleo avanzó un 1% en Vaca Muerta, impulsada por los hidrocarburos no convencionales y pese a la profunda crisis de precios que atraviesa el mercado del crudo a nivel mundial desde el año pasado, con un derrumbe de valores que hundieron al barril afuera hasta los u$s 40. La expansión de la actividad en el megayacimiento que se extiende en la provincia de Neuquén se da de la mano del shale, un sector fuertemente atacado por la petrolera YPF después de su estatización en mayo de 2012, tras la gestión del Grupo Repsol.
El gobierno neuquino de Jorge Sapag informó ayer que el shale apuntaló a la extracción total acumulada de crudo, que ascendió en octubre a los 553.865 metros cúbicos. Ese caudal de producción significó una expansión del 1% respecto del mismo período de 2014 y una producción acumulada para el período enero-octubre del 2015 de 5.333.366 metros cúbicos; es decir, un 3,5% más que para el mismo lapso del 2013, según precisó la gestión de Sapag sobre la actividad en uno de las mayores reservas de shale del mundo.
Los datos oficiales indican que "al mes de octubre de 2015, la producción de petróleo no convencional ya representaba un cuarto del total de la producción del petróleo neuquino, mientras que en enero de 2013 esa relación representaba tan solo el 4%". Ese crecimiento en la producción, señala el gobierno, es el resultado de una política hidrocarburífera llevada adelante por el gobierno de la provincia del Neuquén, que creó la empresa Gas y Petróleo del Neuquén (GyP) para atraer inversores que quisieran impulsar el desarrollo de los yacimientos convencionales y no convencionales.
Asimismo el gobierno neuquino logró una mejora en el precio de los hidrocarburos para hacer más atractiva la producción de estos y que se vieron reflejados en los programas nacionales de incentivos a la producción. Este contexto ubica a Neuquén como la provincia de mayor dinamismo en materia de crecimiento económico y generación de fuentes de trabajo. De hecho, mientras que en los últimos tres años en todo el país el empleo registrado aumentó un 4%, en Neuquén creció 25%.
De cara a 2016, la clave y expectativas están puestas en la decisión que tome el nuevo equipo económico y energético designado por el presidente electo Mauricio Macri. El entrante ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, será el encargado de resolver si mantiene o no el precio diferencial para el barril interno de petróleo pactado por la actual gestión y que ubica a los valo res locales hasta un 80% más que el precio internacional.
Fuente: Cronista.
