Litoral

La deforestación es una de las causas de las inundaciones, según Greenpeace

Según Greenpeace la deforestación es una de las principales causas de las inundaciones de estos días en estos tres países. La crecida de los ríos limítrofes obligó a evacuar a más de 170 mil personas en los tres países.
lunes, 28 de diciembre de 2015 00:00
lunes, 28 de diciembre de 2015 00:00
El aumento de las precipitaciones y la significativa pérdida de cobertura boscosa en Argentina, Brasil y Paraguay no permitió la natural absorción del agua. Y según Greenpeace la deforestación es una de las principales causas de las inundaciones de estos días en estos tres países. La crecida de los ríos limítrofes obligó a evacuar a más de 170 mil personas en los tres países.

"Los bosques y selvas, además de concentrar biodiversidad considerable, juegan un papel fundamental en la regulación climática, el mantenimiento de las fuentes y caudales de agua y la conservación de los suelos. Son nuestra esponja natural y paraguas protector. Cuando perdemos bosques nos volvemos más vulnerables ante las intensas lluvias y corremos serios riesgos de inundaciones", señaló Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace Argentina.

Según datos de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, desde la sanción de la Ley de Bosques (noviembre de 2007) hasta fines de 2014 se deforestaron en el país más de 2 millones de hectáreas, de las cuales 620 mil hectáreas eran bosques protegidos. En ese mismo período, la provincia de Entre Ríos perdió más de 85 mil hectáreas de bosques nativos. Esa provincia es la más afectada por las crecidas, la mayoría en Concordia, ciudad ubicada a orillas del río Uruguay, que vive su peor inundación en 50 años.

"¿Cómo se evita la deforestación? Argentina no penaliza el delito forestal, sólo se paga una multa irrisoria. Y el daño que se hace no se recupera fácil. Aquí no se los obliga a reforestar. En cambio en otros países como Ecuador, España o Indonesia está tipificado como delito", dijo Giardini.  

La situación actual de la Selva Paranaense o Selva Misionera, atravesada por los ríos Uruguay, Paraná e Iguazú, es crítica ya que sólo queda un 7% de la superficie original de bosques. Mientras que en Paraguay y Brasil ha sido prácticamente destruida, la mayor parte remanente se encuentra en nuestro país, donde ha ido disminuyendo desde una superficie inicial de más de 2 millones de hectáreas hasta tan solo unas 40 mil hectáreas de selvas prístinas y alrededor de 800 mil hectáreas de selvas secundarias en la actualidad.

Un reciente informe de la ONU ubica a Brasil, Paraguay y Argentina entre los diez países que más desmontaron durante los últimos 25 años. Entre 1990 y 2015 nuestro país perdió más de 7,6 millones de hectáreas (una superficie similar a la de Escocia), a razón de 300 mil hectáreas al año. Por otra parte, los efectos del fenómeno meteorológico El Niño son uno de los más virulentos desde 1950 y podrían continuar hasta el primer trimestre de 2016, según predijo la Organización Meteorológica Mundial en noviembre pasado.

Respecto de la Ley de Bosques, el Ministro de Ambiente Sergio Bergman, denunció que por el decreto 2585/15, del 26 de Noviembre, 170 millones de pesos, asignados originariamente fueron reasignados a otras áreas, incluidos gastos corrientes del Plan Nacional del Manejo del Fuego y de la Gestión de Residuos Sólidos Urbanos. Desde su sanción en 2007 y reglamentación en 2009, la Ley de Bosques nunca fue debidamente cumplida y nunca pudo contar con su presupuesto correspondiente, estipulado en la propia ley.

La Ley de Bosques es clara. En su artículo 30 el "Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos, con el objeto de compensar a las jurisdicciones que conservan los bosques nativos, por los servicios ambientales que éstos brindan". Este fondo, según estipula en su artículo 31, estará integrado por las partidas presupuestarias que le sean anualmente asignadas a fin de dar cumplimiento a la presente ley, las que no podrán ser inferiores al 0,3% del presupuesto nacional. A esto, además debe sumarse el dos por ciento (2%) del total de las retenciones a las exportaciones de productos primarios y secundarios provenientes de la agricultura, ganadería y sector forestal, correspondientes al año anterior del ejercicio en consideración.

"Nunca desde la sanción de la Ley de Bosques el presupuesto asignado llegó siquiera al 20% de lo que la ley marca. Si sumamos las partidas asignadas al Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos en estos 6 años desde su reglamentación, los bosques nativos de nuestro país contaron con 1.239 millones de pesos. Según estipula la Ley, debería haber contado con 14.750 millones de pesos. Es decir que apenas se le asignó a la conservación de nuestros bosques el 8.5% de lo estipulado por la ley", comentó Manuel Jaramillo, director de Conservación de Fundación Vida Silvestre Argentina.

Comentarios