jueves, 26 de noviembre de 2015
15:55
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La presidente del bloque del oficialista, Juliana Di Tullio, requirió un cuarto intermedio hasta las 16:00 en la sesión especial de hoy, luego de que se pusiera en riesgo la continuidad del debate debido a la ausencia de la cantidad necesaria de diputados para obtener quórum y poder tratar las iniciativas.
La sesión, que se realiza sin la presencia del grueso de los bloques opositores –sólo ocho se sentaron en sus bancas–, quedó en suspenso luego de que por distintos motivos se retiraran diputados del Frente para la Victoria que habían dado quórum para el inicio del debate. En el contexto poselectoral, en el que abundan los pases de factura por los resultados, esas decisiones despertaron suspicacias.
Los diputados que encendieron las alarmas al dejar el recinto fueron los riojanos Javier Tineo, Griselda Herrera y Teresita Madera. Pero el oficialismo ya había tenido problemas para reunir a su tropa desde el vamos: a la sesión no asistieron Carlos Kunkel, Omar Perotti, Gloria Bidegain, Oscar Redzuk, Carlos Gdansky ni Oscar Romero, informó el sitio Parlamentario.com. Otra que dejó la sala –aunque con previo aviso– fue Dulce Granados.
En el cuarto intermedio, Di Tullio y el titular del cuerpo, Julián Domínguez, negocian para reanudar el encuentro, en el que el FpV quería abordar un temario de 89 proyectos.
El inicio de la sesión había sido posible gracias a la presencia de ocho opositores: tres de Unidad Popular de Claudio Lozano, Victoria Donda de Libres del Sur, Alcira Argumedo de Proyecto Sur y los tres del Frente de Izquierda.
La oposición dura, que había pedido a Domínguez que suspendiera la actividad parlamentaria hasta el cambio de gobierno, decidió no bajar al recito. "Que terminen solos, no vamos a participar de esta falta de respeto", explicó Federico Pinedo, jefe de la bancada del PRO. Su par de la UCR, Mario Negri, cuestionó la decisión del FpV de sesionar pese a su reclamo. "Hoy se cierra la escribanía del kirchnerismo", indicó.
En el lapso que duró la sesión se dio media sanción con 129 votos afirmativos al proyecto de creación de la empresa Yacimientos Carboníferos Fiscales Sociedad del Estado (YCFSE). La compañía operará el yacimiento santacruceño de carbón Río Turbio, cuyo mantenimiento está en manos del Estado desde hace 13 años, después de que se le rescindiera el contrato de concesión a una empresa privada.
Fuente: Infobae
