El peor final. Un hombre de 63 años murió en la madrugada del sábado después de recibir una llamada telefónica indicando que tenían secuestrado a su hijo.
El hecho sucedió promediando las 5 de la mañana en Parque Avellaneda. El hombre se encontraba con su esposa durmiendo cuando sonó el teléfono y al atender una voz le indicó que tenían secuestrado a su hijo y que querían una suma de dinero. Al cortar el hombre llamó por teléfono a su hijo quien a esa hora ya habría salido del trabajo pero él no le atendió.
En este escenario, la desesperación familiar se acrecentó y las sospechas de que en verdad fuera un secuestro comenzó a afianzarse en la pareja. Según publica La Nación, en ese momento la mujer llamó a la policía pero el hombre sufrió un infarto y murió.