No hubo desmayo ni fue en Casa de Gobierno y mucho menos en un acto de gobierno. Decenas de especulaciones se tejieron los últimos días entorno a cómo fue el golpe que sufrió la presidenta el 12 de agosto y que le provocó un hematoma que debió ser intervenido el lunes último. Según señaló el candidato a diputado nacional por el oficialismo, Martín Insaurralde en Desayuno Americano, la presidenta estaba ordenando los juguetes de su nieto Néstor Iván Kirchner cuando se tropezó y se golpeó.
"Me contaron que estaba juntando unos regalos de sus nietos. Ella estaba ordenando, juntando los regalos del nieto y trastabilló y se golpeó", dijo el candidato a legislador por el kirchnerismo al momento que aclaró que ella nunca se desmayó y ése fue un rumor que no saben de dónde salió.