Se amaban y se mantuvieron unidos hasta morir. Ambos tenían coronavirus y superar la enfermedad fue una lucha que no pudieron vencer. Tenían 65 y 67 años de edad y murieron con apenas 4 minutos de diferencia. La historia conmovió, primero a médicos y enfermeros, y luego el mundo entero. Antes de morir, y con el último reflejo, se tomaron de la mano, y así fue el desenlace.
Cathy Darlene Peoples y Johnny Lee Peoples fallecieron tomados de la mano en Salisbury, en la localidad de Carolina del Norte, Estados Unidos. Ambos transitaban la enfermedad en estado crítico pero aún mantenían el reflejo necesario para extender las manos y agarrarlas. Eso sucedió apenas los médicos decidieron unirlos a los dos en la misma habitación horas antes de la muerte.
Según relata la prensa internacional, ambos vivieron el amor durante 50 años, de los cuales 48 fue como matrimonio. Su salud había quedado atrapada en el Covid-19 hacía un mes y no podían salir pese a los esfuerzos médicos por impedir que sus vidas se apagaran. Ambos fallecieron el 2 de septiembre en el Centro Médico Regional Novant Health Rowan de aquella ciudad.
“Todo salió mal, todo empeoró. Al día siguiente el personal médico los puso en una misma habitación, la misma habitación de la unidad de cuidados intensivos, juntaron las manos, las enfermeras se reunieron alrededor suyo y murieron con cuatro minutos de diferencia entre sí. Estuvieron casados 48 años, y juntos 50 años, durante los cuales caminaron siempre tomados de la mano”, relató conmovido Shane Peoples, uno de los 3 hijos del matrimonio, a la revista People.
“Las vidas de mamá y papá fueron robadas por un virus del que muchos bromean a diario o simplemente creen que es un engaño de algún tipo. Ambos tomaron esta pandemia en serio y aún así se enfermaron. Mis padres no fueron solo una bendición para mí, mi hermano, mi hermana, nuestros cónyuges y nuestros hijos. Fueron una bendición para todas las personas que los conocieron”, resaltó Shane en un mensaje que compartió en Facebook.
