Horror

Tenía 8 años y desapareció en una fiesta de boda: la asesinó un invitado sin piedad

La nena desapareció del lugar de juegos que había en el salón. Las cámaras de seguridad mostraron que un invitado se la llevó en su auto después de engañarla mostrándole el celular con fotos de perros.
viernes, 19 de junio de 2020 10:42
viernes, 19 de junio de 2020 10:42

Era la fiesta de casamiento de un familiar estrecho. Todos se habían preparado para ese día con tiempo. Habían elegido el mejor vestuario y el entusiasmo para festejar se potenciaba minuto a minuto. Sin embargo el hecho terminó en tragedia. En un momento, Maëlys de apenas 8 años desapareció cuando todos bailaban y nunca más se la vio con vida. Apareció muerta en un descampado y el autor del crimen terminó siendo un invitado. 

El aberrante hecho ocurrió en el sudeste de Francia, el 26 de agosto de 2017. En la fiesta habían 180 invitados y desde el minuto que desapareció todos se convirtieron en sospechosos, al igual que 70 personas vinculados a ellos. Sin embargo uno generó muchas contradicciones y terminó detenido.

Los padres de la pequeña, Jennifer Cleyet Marrel y Joachim de Araújo, siempre mantuvieron la esperanza de que apareciera con vida. Era la menor de sus dos hijas. Colleen la mayor de las dos nenas, tenía 11 años de edad y la buscaba con la misma energía que el resto de la familia.

Según el relato de la prensa internacional, y que reprodujo Infobae, todo ocurrió en pocos segundos y nadie pudo advertir cuando se la llevaban. La nena había ido con un vestido blanco jugaba en un área destinada a los niños en el salón bajo el cuidado de una mujer contratada para la ocasión. A la 1.30, la baby sitter se retiró y a partir de allí los niños quedaron a cargos de sus padres. Por eso, cada tanto, su abuela y su madre, pasaban a verla.

Asi fue como a las 2.45 su abuela habla con ella y fue el último familiar que tuvo contacto con ella. A las 3 de la madrugada, sus padres van a buscar a Maëlys al área de juegos y no la encuentran. Preguntan, preguntan pero nadie sabe responder dónde está. Había desaparecido. 

Piden al DJ que la llame por los altoparlantes de la fiesta y tras llamarla no aparece. El DJ exhorta al resto de los invitados para que ayuden a encontrarla. Pero al cabo de unos minutos, y después de buscar rincón por rincón, no la encuentran. Llega la policía y siguen buscando sin éxito.

Con el pasar de los días y el aumento de la desesperación por encontrar algún rastro, 1.500 policías están abocados a la tarea de encontrarla junto a decenas de perros que siguen el rastro de Maëlys desde el salón de fiestas hasta el estacionamiento del salón. Allí pierden el rastro, lo que indica que la niña llegó hasta allí y se la llevaron en un auto.

Gracias a las cámaras de seguridad se pudo confirmar que un ex soldado, llamado Nordahl Lelandais, de 34 años se la había llevado en un Audi A3 gris. El hombre era un invitado de último momento de los novios y tras el hecho, la policía decidió interrogarlo.

El jueves 31 de agosto de 2017 se sometió a las preguntas de los efectivos y generó serias contradicciones. Afirmó que llegó tarde al casamiento, que vendió cocaína a varios invitados y que se ausentó de la fiesta durante un rato porque se había manchado sus pantalones con vino malbec. Los detectives olfatean algo extraño.

Luego trascendió que, esa noche de la celebración, hubo una discusión entre él y los padres de Maëlys. Algo que la madre confirmó a través de su abogado. Maëlys adoraba los animales y Lelandais había sido visto a solas con ella, en el área infantil, mostrándole en su celular videos de sus pequeños perros. Los padres de Maëlys lo consideraron inapropiado, lo encararon y tuvieron un altercado. Todo esto fue revelado por la prestigiosa revista francesa Paris Match muchas semanas después, cuando ya Lelandais era formalmente un sospechoso.

El 3 de septiembre 2017 fue arrestado: había lavado su auto Audi A3 gris, con un poderoso detergente corrosivo y aspirado meticulosamente la cabina del auto. Lelandais se ausentó de la fiesta entre las 2.45 y las 3.24 de la mañana. Justo a la misma hora de la desaparición de Maëlys. Las imágenes recuperadas de dos videocámaras de seguridad de la ruta muestran que a las 2.47 iba en el auto con la nena. Un minuto antes, a las 2.46 con doce segundos Lelandais había puesto su celular en modo avión. 

Las cámaras vuelven a registrarlo regresando a la zona de la fiesta a las 3.24. Y esta vez se ve una sola imagen: la del conductor. Presumen los agentes que, para entonces, Maëlys ya estaba muerta y su cuerpo descartado.

Unas semanas después los peritos confirmaron que habían encontrado ADN de la niña sobre el tablero del auto. Lelandais, entonces, tuvo que admitir que Maëlys sí había subido a su Audi, pero “sólo para ver a los cachorros” que él decía tener en el baúl. Agregó, además, que estaba con un amiguito de 5 años.

Cuando el auto fue desguazado, por orden de los jueces, encontraron trazos de sangre de la pequeña debajo de la alfombra azul del coche y en el baúl. También hallaron restos similares en el sofá de los padres de Lelandais.

El 30 de noviembre 2017, el fiscal de Grenoble, acusó formalmente a Lelandais de secuestro seguido de muerte. Acorralado por las evidencias, finalmente, en febrero de 2018 Nordahl Lelandais confesó y dio pistas sobre dónde había ocultado el cadáver. Aclaró que primero dejó el cuerpo cerca de su casa para regresar rápidamente al festejo y que, luego, lo llevó a la zona montañosa que les indicó.

El día de San Valentín, el 14 de febrero, los restos de Maëlys fueron hallados en un bosque de hayas, cerca de una cascada.

Con información de Infobae

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