Artur, el esposo de Yulia Sharko, logró liberarla, pero murió ocho días después de un daño cerebral en el hospital regional de Brest, en el suroeste de Bielorrusia. Sin querer, su hija de dos años le había causados graves lesiones el en cuello al presionar accidentalmente el levanta vidrios automático del auto.
Era el cumpleaños número 21 de Yulia. Estaba tratando de sacar a su hija de dos años del BMW a través de la ventana del asiento delantero. Los informes que citan a la policía expusieron que el cuello quedó con heridas irremediables.
Artur, sumamente angustiado, llamó a los servicios de emergencia y su esposa fue trasladada de urgencia al hospital. Sin embargo, murió ocho días después del trágico accidente que sufrió. La asfixia le provocó daños cerebrales.
Se cree que Yulia había regresado a casa después de celebrar su 21 cumpleaños cuando ocurrió el incidente. “Su cerebro sufrió consecuencias irreversibles debido a las arterias retenidas”, dio a conocer un informe local.
Yulia no recuperó la conciencia después del incidente. Por otro lado, Dmitry Ivanyuk, del Comité de Investigación de Bielorrusia, dijo: “La joven estaba con su familia en la casa de un amigo en el pueblo de Staroe Selo”.
A eso, añadió: “El 31 de agosto, alrededor de las 4.30 p.m., su esposo la encontró inconsciente, con el cuello atascado en la ventana de la puerta delantera izquierda de su automóvil familiar”. La mujer fue llevada al hospital regional de Brest “en estado grave con signos de asfixia mecánica”.
Fuente: Daily Mail